Ceuta ha vuelto a dar muestras de solidaridad y generosidad acudiendo al acto organizado por la familia de Javier Rodríguez, el joven que requiere de una intervención quirúrgica vital, para reparar el cavernoma occipital derecho que sufre.
La cooperativa Fray Martín ha donado más de 2.800 kilos de albacora que se han repartido entre los ceutíes que se acercaron hasta los bajos de la Marina Española, a cambio de un donativo para ayudar en la causa de Javier. A cada ceutí se le hacía entrega de cuatro piezas de albacora, más de tres kilos de pescado, a cambio de una ayuda voluntaria que se iba recogiendo en las huchas habilitadas a tal fin. Familiares y amigos de Javier, así como el propio joven, han permanecido durante varias horas en la zona, hasta la cual se han ido acercando los ciudadanos para aportar su donativo, interesarse por el estado de salud del joven y apoyar a la familia en estos momentos. En menos de cinco horas, ya se habían entregado las cerca de tres toneladas, cuya recaudación total ascendió a 1.767 euros. “La gente se ha volcado tanto aquí como en la península, nos llaman muchas personas para darnos donativos y las asociaciones también nos están ayudando”, explica el padre de Javier, Francisco Rodríguez. La respuesta ciudadana ha devuelto la esperanza a esta familia que vio cómo las posibilidades de recuperación de Javier se esfumaban tras el diagnóstico de los primeros médicos. “No es que la Seguridad Social no quiera operarlo, es que decían que podía quedar tetrapléjico”. Tras una segunda opinión en la clínica Quirón de Algeciras, la familia recibía mejores expectativas: la operación tendría un 99% de posibilidades de ser un éxito, pero el excesivo precio, de entre 24.000 y 30.000 euros, se cebaba de nuevo en las esperanzas de ofrecer una oportunidad a Javier. El acto de ayer vuelve a traer la esperanza a la familiar del joven, quien reconoce haberse visto abrumado por la respuesta ciudadana, “estamos muy contentos, esperamos que todo siga así”, comenta la hermana de Javier, Susana Rodríguez. Este es uno de los muchos actos que están previsto organizarse para continuar recaudando fondos para Javier: un festival de agrupaciones carnavalescas, coro de villancicos, meriendas solidarias o una paella, elaborada por su propio padre, además de la venta de calendarios y el reparto de huchas por distintos comercios y establecimientos de la ciudad.
“Ceuta se desvive mucho, pero no me esperaba tanto apoyo”
En el acto de ayer no pudo faltar el auténtico protagonista de esta campaña Javier Rodríguez, que no acaba de asimilar la respuesta de la ciudadanía. “Antes de esto, llevaba unos días muy hundido, pero ahora estoy más animado porque, aunque sé que Ceuta es una ciudad que se desvive mucho, pero no me esperaba tanto apoyo”. Al margen de las donaciones procedentes de la península, Javier también está contando con apoyo económico de Casablanca y Francia, donde tiene varios familiares. Asegura que está llevando una “vida normal”, a recomendación de los médicos. Práctica deporte y está estudiando por las tardes, “porque tengo que llegar allí con motivación y no hundido”. De momento, asegura que su visión es buena, “sólo puedo perderla en la operación”, aunque sufre de algunos temblores en la mano.