Cientos de personas asistieron ayer al funeral de Shifaa, la niña de cinco años fallecida en accidente de tráfico en Merzouga, al sureste de Marruecos, a comienzos de esta semana. Hasta el cementerio de Sidi Embarek se desplazaron familiares, amigos y conocidos de la familia, quienes protagonizaron una emotiva despedida.
Los restos mortales de la pequeña fueron repatriados este miércoles a Ceuta gracias a la colaboración entre los servicios fronterizos hispano-marroquíes y la asistencia del Consulado de España en Casablanca, en cuya jurisdicción ocurrió la tragedia.
El todoterreno en el que viajaba la pequeña Shifaa integraba una expedición compuesta por varios vehículos. El grupo en el que se encontraban los padres de la niña y otros parientes disfrutaba de unos días de vacaciones en un desierto con gran atractivo turístico.