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Las dependencias amanecieron ayer sumidas en el agua que se coló entre todas las goteras y arrastró consigo fragmentos del techo
Está siendo un otoño pasado por agua, terminó noviembre con lluvias y diciembre ha dado la bienvenida con ese agua “que tanta falta hacía”,comentaban los vecinos, pero las lluvias torrenciales y concentradas como las del pasado fin de semana nunca dejan buenas consecuencias. Ayer se recogieron 60 litros por metro cuadrado en las primeras doce horas del día. Una jornada sin tregua que trajo consigo numerosas incidencias, todas ellas de tipo material, pero en muchos casos con grandes perjuicios, como es el caso del ‘Mercado del Mixto’, sito en Pedro Lamata, que teme la llegada de este tipo de temporales.
El Mercado amaneció ayer inundado provocado por las deficiencias que presenta y que desde hace años demandan para su reparación a la autoridad competente comerciantes y usuarios. “Cuando entramos nos llegaba el agua por los tobillos, entre todos hemos desembalsado con cubos y hemos cubierto el mercado con cartones, el problema es que dada la cantidad de goteras sigue cayendo”, explicaba una de la comerciantes, Francisca Perales. A las 12.00 horas el aspecto que presentaba era mejorable, algo más transitable, y para ello tuvieron que vestir el pasillo con cartones y cubos para evitar que la situación se repitiese y los vecinos pudiesen acceder, aunque las condiciones para transitarlo eran bastante pésimas. “En esta barriada viven principalmente personas mayores, no es la primera vez que se han caído en días de lluvia, estos episodios se repiten constantemente”, aseguraba el presidente de la barriada, Francisco Ayora.
Pero los temores no sólo llegan con las tormentas, la situación del lugar es deplorable. Se avistan en el suelo fragmentos caídos del techo, que declaran, “ocurre a diario” y temen que en cualquier momento éste se desplome.
La pésima situación del Mercado ha sido comunicada con frecuencia a las autoridades, donde tienen constancia de ello y al parecer hace un tiempo licitaron su reparación, pero Ayora manifiesta que siguen esperando esa reforma después de varios años y mucha insistencia.