Barreños llenos de desechos que caían en forma de gotera del techo, tanto en una sala como en parte de un pasillo. De esta guisa encontraron ayer los efectivos del Servicio de Inspección de Sanidad la Escuela de Infantil ‘La Pecera’.
Desde hacía cuatro días, el centro sufría filtraciones de aguas fecales por unos problemas en un bajante de saneamiento correspondiente a las viviendas de Juan XXIII, las cuales están encima de estas instalaciones.
Tras esta revisión del estado de las dependencias, la Consejería de Sanidad y Consumo determinó que “no existe riesgo para la salubridad de los alumnos ni de la plantilla”, según trasladó la Ciudad Autónoma. En principio, ‘La Pecera’ reanudará su actividad con normalidad el lunes si todo marcha tal y como está previsto. De hecho, durante esta semana, el centro funcionó con normalidad.
Aunque se estuvo trabajando toda la semana en resolver este estropicio, entre el lunes y el martes se dedicaron a localizar las averías que el Ejecutivo local estimó en dos. A mediodía de ayer, después de una mañana en la que las goteras se intensificaron, fuentes del Gobierno comunicaron que el desperfecto estaba arreglado.
A pesar de que el incidente resultó muy desagradable –como puede comprobarse en el contenido de los cubos–, “no afectó al servicio” porque las goteras se originaron en dependencias distintas a las aulas. En cual-quier caso, aquellos puntos en los que apareció este agua maloliente fueron inutilizados.
Las obras en esta Escuela de Infantil de titularidad pública finalizaron a mediodía de ayer y, aunque por la tarde estaban programadas las mismas actividades extraescolares que otros días, éstas fueron suspendidas pero en ningún caso por problemas de sa-lubridad. Según la Ciudad Autóno-ma, esta cancelación permite ganar más tiempo para airear el centro y que las obras se sequen. Para tranquilidad de los padres, la administración autonómica garantizó que las actividades se recuperarán.
A Arasti Barca, la adjudicataria del servicio, se le acumulan los incidentes en ‘La Pecera’. Las presuntas irregularidades en las altas y bajas de los trabajadores en los registros de la Seguridad Social en 2013; la inspección por la supuesta situación irregular de unos trabajadores; y una sanción de la Inspección de Trabajo son algunos de ellos.
La elección de Juan XXIII estuvo en entredicho
La elección de los locales en los bajos de Juan XXIII para la creación de la Escuela de Infantil fue puesta en entredi-cho por Caballas debido, precisamente, a que ya acumula-ba aguas fecales en 2010 y el acceso al centro resultaba complicado. En el Pleno de di-ciembre de 2011, el principal partido de la oposición criticó a la Ciudad porque, en aquel momento, también “se le llo-vían los bajantes” y apuntó a que algún “problema habrá habido con la obra”.