Vaso medio lleno o medio vacío. Ceuta logró esquivar 2013, quizás el último año de la recesión, con cien parados menos inscritos en las oficinas del INEM, una cifra inferior en un 0,91 por ciento a la del cierre de 2012.
El balance que revelaba ayer la Encuesta de Población Activa (EPA) es positivo –aunque no tanto como el promedio nacional, que arroja un descenso del 1,16 por ciento en toda España– pero no oculta la losa que pesa sobre la ciudad desde hace ya demasiados años: ostentamos el triste honor de ser, aún, la comunidad que arrastra, con un 36,82 por ciento, la mayor tasa de desempleo regional de toda España. Andalucía, con un 36,32 por ciento, y Melilla, con un 35,36, completan el único pódium que gustaría poder evitar a los políticos.
Trasladado a cifras absolutas, en la ciudad seguían buscando empleo el pasado 31 de diciembre, sin encontrarlo, 12.500 personas. De ellas, 6.300 hombres y 6.200 mujeres. Esa paridad a la hora de compartir desocupación, con una práctica igualdad por sexos, se desequilibra sin embargo al analizar justo el capítulo contrario: de los 21.500 ceutíes que pueden presumir de tener un trabajo, 13.200 son hombres y el resto, sólo 8.200, son mujeres. Eso se traduce en que la tasa de actividad en el primer caso (67 por ciento) supere en veinte largos puntos a la fuerza laboral femenina (47 por ciento).
El dato positivo también lo aporta el volumen de ocupación. En ese apartado, Ceuta despidió 2013 añadiendo 700 más al cómputo anual respecto al último trimestre de 2012, lo que supone un incremento del 3,53 por ciento, el mayor incremento de todas las comunidades autónomas y en las antípodas del recorte del 1,17 por ciento de media nacional y la destrucción de casi 199.000 empleos en todo el país. Otro motivo para el optimismo moderado.
A nivel nacional, también luces y sombras. El número de parados disminuyó en 69.000 personas durante 2013, hasta cerrar el año con 5.896.300 desempleados, lo que representa la primera caída anual registrada desde 2007, aunque en el plato negativo de la balanza hay que situar que durante el año pasado se siguió destruyendo empleo. En concreto, el ejercicio de 2013 se cerró con 198.900 ocupados menos, de forma que el número de trabajadores en activo retrocedió a 16.758.200 personas, marcando así la sexta caída anual consecutiva y dejando la tasa en el 59,43 por ciento de la población en edad de trabajar.
La clave de la caída del paro está en la evolución de la población activa, que se redujo en 267.900 personas, hasta un total de 22.654.500, lo que provocó además que la tasa de paro haya subido una centésima respecto a 2012, hasta alcanzar el 26,03 por ciento, a pesar de haber menos desempleados. Tras tocar techo en el primer trimestre (27,16 por ciento), la tasa de paro se ha quedado en un nivel muy parecido al registrado a cierre de 2012 (26,02 por ciento), pero muy lejos de valores registrados en 2007, cuando la crisis aún no había impactado en el mercado laboral y la tasa era del 8,6 por ciento, un nivel a años luz ahora.
Los datos revelan que el paro no afecta por igual a hombres que a mujeres en España, ya que mientras que el desempleo femenino aumentó en 18.200 personas, el masculino disminuyó en 87.300. La caída del paro se registró en todos los sectores, con un mayor impacto en el de los servicios (163.000 parados menos).
, seguido de la construcción (86.400 menos), la industria (53.100 menos) y la agricultura (19.000 menos).
Sin embargo, aumentó el número de personas incluidas en el colectivo de parados de larga duración (163.700 personas más), así como entre aquellos que buscan su primera oportunidad laboral (88.700 más).
Atendiendo a la nacionalidad, en 2013 disminuyó el número de parados españoles en 9.600 personas y el de extranjeros, en 59.500 personas, pese a lo que la tasa de paro de ambos colectivos se situó en el 24,3 % y 36,6 %, respectivamente, debido a que la población activa de los foráneos ha caído en mayor medida.
En cuanto a la ocupación, los 198.900 empleos destruidos en 2013 afectaron a ambos sexos, todas las nacionalidades, sectores y situación profesional, si bien la reducción fue mayor en el caso de los hombres (124.500 menos), los extranjeros (109.000 menos), los trabajadores públicos (121.400 menos) y los asalariados (188.200 menos).
Por tipo de contrato y jornada, la cosa cambia, ya que el número de indefinidos se redujo en 269.500 personas, mientras que aumentó en 81.300 personas el de temporales, al tiempo que los trabajadores a tiempo completo disminuyeron en 339.300 y se incrementaron en 140.400 los empleados a tiempo parcial.
A la luz de estos datos, el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, se ha mostrado optimista ya que, aunque el número de parados es "altísimo" e "inaceptable", el Gobierno espera la creación neta de empleo en la primera parte del año.
Por su parte, el portavoz parlamentario de Economía del PSOE, Valeriano Gómez, ha advertido de un aumento del "empleo sumergido" tras la regulación laboral aprobada por el Gobierno, que impulsa el contrato a tiempo parcial y permite complementarlo con horas adicionales.
La patronal ha indicado que los datos avanzan que España "comenzará a crear empleo antes de lo previsto", mientras que UGT y CCOO han achacado el descenso del número de parados a la caída de la población activa y han resaltado que el empleo existente es de peor calidad, con menos indefinidos y a tiempo completo y más temporales y a tiempo parcial. EFE
2.640 extranjeros afiliados a la Seguridad Social
Ceuta contaba, al cierre del año 2013, con 2.640 extranjeros que cotizaban legalmente a la Seguridad Social, un 0,20 por ciento menos que en el año precedente. De ellos, la gran mayoría (2.363) estaban incluidos en el Régimen General, mientras que los restantes 247 figuraban como trabajadores autónomos o por cuenta propia. Del primer grupo, el servicio de hogar absorbe al mayor porcentaje, hasta 1.173 empleados, mientras que las actividades relacionadas con el mar, la pesca fundamentalmente, engloba a otros 30. En toda España son 1,54 millones los no nacionalizados afiliados a algún régimen de la Seguridad Social.