Como un ejemplo de servidor público “que siempre antepone el interés general a cualquier otro” y un gestor “eficaz donde los haya”. Así definió ayer el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, al ministro de Justicia al que presentó como una persona “extremadamente sensible” a las necesidades de Ceuta. “Me consta de que tiene un trato especial para Ceuta, sabe que aquí se dan unas circunstancias especiales por su extrapeninsularidad y su singular hecho fronterizo”, algo que exige de los poderes públicos, advirtió, “un trato singular y un mayor esfuerzo y de ahí que Ceuta esté estrenando una Oficina Judicial en posición de vanguardia en el conjunto de España y que esté dotada de manera suficiente en medios personales y presupuestarios a pesar de las dificultades para que nuestros juzgados funcionen bien y el interés manifiesto del ministro por atender la demanda histórica de ampliar la sede judicial”.
Como es habitual en él, el jefe del Ejecutivo se deshizo en elogios con su invitado, al que agradeció su visita a la ciudad, “porque es muy bueno que un ministro nos visite para conocer y tratar in situ las necesidades de su departamento y también porque trasmite aliento, apoyo, ánimo e impulso a las personas que en ámbito de la Justicia procuran ofrecer un servicio de calidad en un área de fundamental para nuestra convivencia, desarrollo social y para el cumplimiento de la ley”.
Y es que para Vivas, Ruiz Gallardón no es sino un persona “coherente en sus planteamientos” y “digna de admiración “porque tiene una “brillantísima trayectoria como servidor público, como concejal, alcalde, diputado autonómico, parlamentario y ahora como ministro, pero siempre el interés general por encima de cualquier otro”. El presidente ceutí lo colocó como un ejemplo “para los muchos que tenemos vocación de servicio público”.
El presidente de la Ciudad no quiso desaprovechar la oportunidad de recordar el “sentimiento patriótico” que embarga a los ceutíes “y que llevamos en nuestro código genético” y que es una obligación la realizar “un esfuerzo permanente” para superar “nuestras diferencias y cumplir con nuestra obligación de servir a España”.
Juan Vivas reiteró el ejemplo de convivencia que ofrece Ceuta en unos momentos como los actuales, una convivencia que percibe como una esperanza “para transmitir al mundo que la convivencia es fruto de riqueza”.