Asintió sobre que había sido una experiencia personal inigualable, “en una labor que me gusta y donde he podido ejercer mi vocación política”. Dijo que tenía la conciencia tranquila en todos los aspectos y que había hecho su trabajo de la mejor manera que sabía, aunque pidió disculpas por los errores que hubiera cometido, “y si me he equivocado nunca ha sido para perjudicar a nadie”.
A continuación hizo un relato amplio de agradecimientos. En primer lugar para los ciudadanos de Ceuta, “incluso a los que han podido ser críticos, porque también se aprende con ello y también por su paciencia”. Dio las gracias a continuación a su partido político, el PP, del que dijo que continuaba a disposición de sus máximos responsables, resaltando que “es la mejor opción para Ceuta y para España”.
No dejó aparte a los medios de comunicación, “porque todos me han tratado con respeto y profesionalidad sin excepción”. Igualmente, a los empleados públicos, tanto a los funcionarios como al personal de las sociedades municipales. En quinto lugar de este catálogo de agradecimientos se dirigió a sus compañeros de gobierno, tanto a los presentes como a los que no pudieron acudir, de los que destacó que formaban un gran grupo de gestión.
Como no podía ser de otra manera tuvo un capítulo especial para su familia de quienes dijo que habían sido un apoyo incondicional a lo largo de estos años por su infinita paciencia, “ya que me comprendieron cuando decidí dar el paso a la hora de entrar en política y ahora cuando me voy”. Y el último apartado estuvo dedicado al presidente de la Ciudad Autónoma, Juan Vivas, de quien señaló que había aprendido mucho tanto en el plano personal como en el profesional “y ha sido un orgullo haber trabajado a su lado. Sé que no le va a gustar lo que voy a decir, porque ya me lo ha advertido cuando hemos estado arriba. Ha sido, es y espero que continúe durante muchos años porque es el mejor alcalde que ha tenido esta ciudad”.
Por último le deseó suerte a su sustituto Emilio Carreira, “que es una persona que lo hará muy bien, ya que tiene una experiencia contrastada”.
“Me conocía desde pequeño”
El hasta ahora consejero cuando habló de su relación con Juan Vivas dijo que había tenido la suerte de que lo conociera desde pequeño, incluso señalando el propio Guillermo Martínez que había asistido a su comunión y a su boda, dada la gran amistad del presidente con la familia del ahora dimisionario consejero. En estos ocho años, Martínez fue desde 2005 a 2007 jefe del gabinete técnico de la Presidencia de la Ciudad. En 2007 fue nombrado por Vivas consejero de Economía, pero sin formar parte de las listas y al comienzo de la presente legislatura, consejero de Fomento y desde abril de 2012 consejero de Economía, Hacienda y RRHH.
Vivas ensalzó a Martínez
El presidente de la Ciudad Autónoma fue el encargado de comunicar la decisión que había tomado el consejero de Economía, Hacienda y Recursos Humanos, Guillermo Martínez, señalando que había sido una decisión “meditada, legítima y respetable y que responde únicamente a cuestiones personales”. Este sí fue un punto que quiso dejar fue muy claro el mismo jefe del ejecutivo, para recoger que no existía ningún enfrentamiento, ni pérdida de confianza, sino que el abandono de Guillermo Martínez nada más que respondía a un tema exclusivamente personal, “porque no han existido discrepancias, ni conmigo ni con los demás compañeros de equipo de gobierno”. Si recordó que de todas maneras a la “política se accede de manera voluntaria y por tanto también uno se puede ir cuando así lo decida”.
Donde el presidente Vivas no quiso cerrar el telón de manera definitiva fue en el futuro político de Guillermo Martínez al dejar caer que “no sé si será un adiós para siempre o temporal”. A partir de este momento comenzó a analizar la labor que había tenido el consejero saliente durante los ocho años en que había permanecido como un colaborador muy cercano a su persona, “porque la situación que deja es difícilmente memorable. Ha tenido una trayectoria brillante y ejemplar. No solamente ha sido leal conmigo, que es lo de menos, sino con el interés general y con los ciudadanos de Ceuta. Ha sido una persona dedicada que no ha tenido ni horas en el día ni días libres si ha hecho falta para trabajar”.
Reconoció que había sido un político “eficiente, íntegro, firme y honesto, lo cual desde luego no es nada fácil”. Avanzó el propio responsable del Gobierno autonómico que ahora había decidido dar un giro a su vida desde el punto de vista profesional y que, por supuesto, regresaba a su puesto en la Sociedad Municipal de Fomento (Procesa) donde es coordinador de Fondos Comunitarios, “donde por supuesto sus conocimientos y experiencias nos serán de gran ayuda y más desde una posición como puede ser la Oficina de Seguimiento del Plan Estratégico que decidimos crear en la reunión del jueves de la semana pasada de la Mesa por la Economía y que está dentro de Procesa”.
Sustituto
Luego como es lógico, tras hablar de quien se iba le tocaba hablar de quien llegaba. Dijo en relación con la persona, antes de dar el nombre de Emilio Carreira, que había sido una decisión “meditada y atinada” y que desde su punto de vista debía reunir dos condiciones el sustituto.
La primera de ellas era la capacidad para dar continuidad al trabajo que se estaba haciendo en la Consejería de Economía, Hacienda y Recursos Humanos. Y luego puso una segunda condición, que fuera una persona de su confianza.
Y sentenció que Carreira reunía la dos condiciones, “es una persona que conoce el área porque ya fue durante tres años el máximo responsable de la misma y tuvo que afrontar retos difíciles de los que salió airoso, junto con que es una persona que es solvente en la gestión”.
Por último, en líneas generales y en relación con los planes de su gobierno en los próximos años quiso dejar bien claro que “no hay ningún replanteamiento, porque seguimos adelante con las mismas ganas y la misma fe. Es un honor servir a Ceuta”.
