El director general de la Policía Nacional, Ignacio Cosidó, valoró ayer el trabajo realizado por los agentes de este cuerpo en materia de seguridad, recalcando que, siendo “buena” la respuesta, se debe mantener similar tendencia positiva. Así lo manifestó en declaraciones a los periodistas al término de una reunión de trabajo mantenida con el delegado del Gobierno, Francisco Antonio González Pérez, y los mandos policiales.
Valorado el trabajo policial, ratificó lo ya anunciado por el jefe superior, Pedro Luis Mélida: que llegarán el próximo julio nuevos vehículos aunque en materia de personal no se haya conseguido novedad alguna. Sobre este punto, Cosidó avanzó, a modo de disculpa, que en Ceuta la cobertura de plazas está algo por encima de la media nacional.
Sobre la que será la futura sede de la Jefatura Superior, el director general de la Policía no ofreció novedad alguna de manera específica pero sí que entre líneas dio a entender una posibilidad que hasta la fecha no se había puesto encima de la mesa: que en vez de construir una Jefatura, se eche mano de las instalaciones ya existentes, reformándolas lo que acortaría plazos y disminuiría el gasto.
La ubicación de la futura sede en la barriada del Príncipe (decisión que no es avalada por los mandos policiales) no está hoy por hoy decidida, más si cabe tras esa alternativa avanzada ayer por Cosidó.
Con la visita del máximo responsable de la Policía tocaba hablar también de Marruecos. Cosidó se deshizo en parabienes sobre su colaboración en materia de seguridad y migratoria calificándola de “excelente”. Recordó que el Gobierno español y el marroquí han acordado la puesta en marcha de un equipo conjunto para luchar contra el tráfico de seres humanos “que ya está funcionando”, al objeto de controlar debidamente una inmigración ilegal que resulta problemática tanto para España como para el propio reino alauí. Tras la reunión de trabajo, el mandatario policial comprobó in situ el estado de las instalaciones policiales además de girar visita a la frontera del Tarajal, en donde, bajo el amparo del Ministerio del Interior, se va a llevar a cabo una ambiciosa reforma que se traducirá en “un tráfico más ágil y abierto” con “una frontera más segura y mejor preparada para hacer frente al control de tráficos ilícitos”.
En cuanto a los planes del Gobierno central para mejorar la respuesta policial ante las denuncias por desapariciones, que ha cifrado “entre 13.000 y 14.000” al año, Cosidó ha resaltado que el índice de esclarecimiento de este tipo de asuntos “ronda el 98 por ciento” y ha apuntado que la prioridad es mejorar los laboratorios y procedimientos legales que, a través del ADN, facilitan a la Policía Científica la identificación de cadáveres y restos humanos.