La marcha, denunciada oficialmente, de otros dos ceutíes a Siria y el dato de que hubieran sido acompañados en ese viaje por marroquíes de Castillejos no hace sino dejar más clara aún la conexión existente entre los captadores que se mueven al otro lado de la frontera y los que hacen su papel en la ciudad. Ninguna de estas salidas ha sido accidental, sino que detrás de las mismas actúan con constancia los grupos que están dedicándose a promover todo tipo de charlas e inculcar conocimientos entre determinados núcleos poblacionales de la ciudad. A Siria marchan jóvenes ceutíes y marroquíes que, en algunos casos, dejan atrás familias e incluso esposas embarazadas, alimentando la veta abierta desde hace ya bastantes meses por los enlaces de estos grupos que promueven la yihad.
Los enlaces actúan en el triángulo Marruecos-Ceuta teniendo conexiones además en Europa y su objetivo es promover e inculcar mensajes de contenido radical a través de foros que van desde los cafetines de turno hasta determinadas mezquitas. Los resultados de este tipo de concentraciones se llevan evidenciando desde el pasado abril de 2012 con la marcha de los tres primeros ceutíes a tierras sirias.