En la actualidad la ocupación está al mismo nivel que el pasado año en junio Cuatro de cada diez inmigrantes que llegan a Ceuta y permanecen en el Centro de Estancia Temporal se quedan en Europa. Así lo reflejan los últimos datos que se manejan, del pasado año, donde queda constancia que la mayor parte son repatriados a sus países de origen. Algunos lo vuelven a intentar. Otros se rinden. Pero todos coinciden en que tiene que mejorar la situación de los CIE (Centros de Internamiento) en los que deben permanecer hasta ser deportados a sus países de origen por obtener finalmente un expediente de expulsión. En este sentido se está trabajando para la aprobación del nuevo reglamento que rige estos centros, estando cuestionado el cierre del que existe en Málaga por sus condiciones. “No nos afecta especialmente ya que la mayor parte de los inmigrantes que llegan a Ceuta son trasladados o bien al de Algeciras o al de Tarifa o incluso al de Madrid cuando hablamos de repatriaciones ya conveniadas con otros CIE”, explica el director del CETI de Ceuta, Carlos Bengoechea.
Como el año pasado
Los que resuelven el expediente de manera positiva, se trasladan a los centros que pertenecen a la red privada conveniada con el Estado que gestionan las Ongs. En la actualidad, la capacidad del CETI de Ceuta es similar a la del pasado año en las mismas fechas y ronda los 400 inmigrantes, distando mucho de la que llegó a alcanzar de casi 800 residentes.
La llegada del buen tiempo provoca las avalanchas de llegadas masivas. El mismo miércoles lo intentaron aproximadamente unos 60 inmigrantes de madrugada corriendo en grupo hacia el espigón del Tarajal. Las fuerzas de seguridad marroquíes evitaron el paso, estando preparados del lado español también un contingente de agentes por si fuera necesario. El pasado verano fueron muchas las avalanchas de inmigrantes para llegar a Ceuta, paso previo a su sueño europeo ya que todos quieren cruzar el Estrecho para viajar a diferentes países y buscar mejores condiciones de vida que en sus países de origen. Cientos de ellos esperan en Marruecos la oportunidad para cruzar, siendo muchos los captados por mafias dedicadas al tráfico de personas.