El cierre de los tres centros de salud de la ciudad, Recinto, Otero y Tarajal, durante la temporada estival a partir de las cinco de la tarde es ya una realidad. Es la principal conclusión de la reunión que este jueves han mantenido el director territorial del INGESA, Fernando Pérez Padilla, y una representación de las centrales sindicales CCOO, UGT, CSIF, USAE y USO.
Lo que queda ahora por fijar son las fechas concretas de inicio y finalización de la medida y también la petición cursada por los sindicatos del ámbito sanitario y que se centra en que el cierre de los centros de salud a las cinco de la tarde no repercuta en un detrimento de calidad en el desempeño del trabajo de los profesionales ni en la atención a los ciudadanos.
Para lograr ambos objetivos, los representantes sindicales han requerido a Pérez Padilla que se refuerce la plantilla del personal del Hospital Universitario, el Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) y del 061, que serán los órganos que tengan que asumir las atenciones que no realizarán los centros de salud a partir de las cinco de la tarde en verano. Quedan para el estudio en reuniones posteriores otros asuntos, como el incremento de la plantilla en Pediatría.