La empresa Cyrespa Arquitectónico ha iniciado ya los preparativos para la reparación integral de la cubierta de la catedral de la Asunción, gravemente afectada por filtraciones en los últimos años. Según ha explicado el arquitecto que ha redactado el proyecto de rehabilitación y director de la obra, Pedro Gurriarán, los trabajos efectivos comenzarán en un plazo no superior a los diez días y se procurará que el templo no tenga que ser cerrado al culto a causa de las obras “en ningún momento”.
El acopio de materiales y la grúa se instalarán en la plaza trasera a la catedral, donde se colocará también la grúa “de tal manera que la zona de obras quedará apartada de la puerta principal de la catedral y no estorbará para que pueda ser utilizada para el culto”.
Gurriarán destaca que la cubierta del templo principal de Ceuta tiene problemas de permeabilidad que se han visto agravados en las últimas décadas, “porque el agua de lluvia se ha ido filtrando con el paso de los años y ha calado a las bóvedas y muros, donde el proceso se ha acentuado porque están empapados”.
Advierte el arquitecto que, sin la intervención que se ha programado, “se podía dar luga a patologías muy importantes en el edificio”. Esta circunstancia motivó que la Ciudad, a través de la Consejería de Educación y Cultura gestionara con el extinto Ministerio de Cultura la inclusión de la seo ceutí en el Plan de Catedrales, de forma que se pudiera financiar a través de esta vía la importante reparación, a la que el Estado destinará en este ejercicio más de 300.000 euros.
“Lo que se pretende es eliminar todos estos problemas derivados de las humedades”, matiza. Para ello está previsto que se desmonten todas las piezas de la cubierta y sustituir, las que se encuentren en peor estado, por otros elementos idénticos “respetando la identidad y la imagen de la catedral”. Entre las piezas que se sustituirán se encuentran los cerchos de madera, así como las tejas, que se reemplazarán y bajo las cuales se colocarán paneles impermeables. La intervención, que durará ocho meses a partir de su inicio, también afectará al crucero y la capilla del sagrario, en la nave central.
Además, algunas de las vigas que soportan la techumbre presentan problemas estructurales, agravados por la acción de hongos e insectos. Se colocará un nuevo tablero impermeable sobre la estructura, tras lo que volverán a cubrirse los paños aprovechando el mayor número posible de tejas originales y de vigas.
Los muros perimetrales serán saneados mediante picado manual y se volverá a compactar con mortero tradicional. Este tipo de mortero se empleará asimismo para revocar toda la superficie que se protegerá con una malla antialcalina. También se coserán las grietas aparecidas en la linterna.