Cinco personas permanecen imputadas por la muerte, a balazos, del vecino del Príncipe Alfonso, Karim Mohamed. Todos ellos están en prisión preventiva mientras que el quinto, cuya detención nunca trascendió, permanece en libertad provisional, ya que su papel en esta historia no tendría, presuntamente, la misma carga de implicación que se le imputa al resto.
La UDYCO ha dado por cerrada la investigación -salvo algún vuelco que pueda suceder de última hora- por la muerte del que fuera miembro de las brigadas cívicas, levantándose, a finales de la semana pasada, el secreto de sumario que pesaba, desde julio de 2011, sobre la causa. Los detenidos están acusados, inicialmente, de un delito de homicidio, aunque dicha calificación podría cambiarse a otro de asesinato antes de que se señale el juicio oral para lo que todavía queda tiempo.
De hecho el juzgado número 5, que es el que lleva la causa, continúa realizando trámites en torno a este asunto, contando con nuevas testificales y esperando la remisión de informes periciales sobre los casquillos que se recogieron in situ por parte de la Policía Científica, entre otros. En esta causa se ha contado con las declaraciones de varios testigos, entre ellos un grupo de protegidos, que son los que apuntaron a las personas apodadas como ‘Pajarito’, ‘Grana’ y ‘Abdelmunin’ como presuntos participantes en este suceso. Posteriormente, ya en este año, se procedía a la detención de un cuarto implicado, llamado Hicham, tras unas investigaciones policiales paralelas llevadas a cabo. Según las mismas cada uno de los detenidos habría llevado a cabo un papel distinto: uno de chófer para conducir el coche con el que subieron a la barriada, otros dos ejecutores de los disparos y un cuarto que poco antes de los hechos habría ido advirtiendo en la barriada lo que iba a pasar.
Los detenidos niegan su participación en los disparos y sus defensas ya trabajan en hacer prevalecer la presunción de inocencia.