Vox ha llevado a la sesión de control al Gobierno una cuestión sobre cómo se está aplicando la ordenanza reguladora del procedimiento sancionador en Ceuta para los incumplimientos de los ciudadanos en relación con sus obligaciones respecto al Padrón.
La consejera Kissy Chandiramani ha ofrecido datos que chocan con el ideario de Vox de que la mayoría de las bajas están asociadas a los falsos empadronamientos.
A fecha de marzo de 2023 estaban registradas 84.653 personas, a 31 de diciembre de este 2024 había 84.809.
Las bajas se dan por varias razones, pero sobre todo por cambio de residencia, defunción, caducidad o duplicidad, “no por su relación con empadronamientos falsos como hace ver”, le ha afeado Chandiramani.
La ordenanza no está en el portal web, pero sí en el BOCCE, siendo de fácil acceso para cualquier ciudadano. No constan denuncias en el área de Estadística, pero sí comunicaciones por inscripciones indebidas.
Hubo 507 expedientes tramitados de enero de 2022 a diciembre de 2024, pero no se han registrado sanciones.
¿Por qué son las bajas?
Las inscripciones por mala anotación son la mayoría, pero también hay muchas bajas que se producen por cambio de residencia, en concreto el 74% de las casi 2.300 que se registraron por ejemplo en 2024.
Las sanciones se producen si la baja se lleva a cabo por falta de veracidad y se inicia expediente sancionador cuando se comprueba que de modo fehaciente ha incurrido en falta de veracidad y que no hayan sido ya sancionados.
Pueden producirse casos por descuido, por lo que hay que motivar de manera clara por que se ha dado esa baja. Las infracciones graves o muy graves deben darse dos o tres expedientes para instruir ese expediente.
No se ha registrado ninguna sanción al respecto. Vox también ha preguntado sobre el sistema de cámaras Safe City, cuyo funcionamiento ha sido valorado.
Nunca he visto un partido político con tanta paranoia con el tema de los "jai'; ni que tuviéramos tantos candidatos a ocupar la Delegación del Gobierno, la Superintendencia de la Policía Local, la Jefatura Superior de la Policía Nacional, la Comandancia Gral.o de la Guardia Civil, entre otros puestos de responsabilidad política por asignación.
Deberían hacerse las siguientes preguntas que me parecen más acordes a la realidad, y son las siguientes:
¿se están realizando los adecuados controles como se hacían de antaño de identificar a todos los componentes de la unidad familiar que convivan en el mismo domicilio?
¿se están ejecutando las bajas en el padrón municipal por cambio de residencia a otro punto del territorio nacional por cuestiones laborales ( no se incluyen a los universitarios)?
Lo que sí es chocante es que hayan ceutíes que residan en territorio peninsular/insular y sigan disfrutando de las ventajas fiscales y de transporte, ya que pudiera existir la picaresca de estar inscrito en más de un municipio para beneficiarse del régimen económico fiscal que les corresponden a las ciudades de Ceuta y Melilla.
El problema de todo esto es que a los ciudadanos de la UE no se les exige la renovación del padrón si no es por motu propio, y ahí entra la picaresca de algunos de nuestros paisanos; en cambio a los extracomunitarios sin permiso de residencia permanente, se les exige renovar el padrón cada dos años, si no ha habido cambios legislativos al respecto.
Por tanto, es más lógico indagar en el uso fraudulento de continuar inscrito en el municipio de Ceuta que lo planteado por Vox de una teoría conspiranoica a lo moruna de falsos empadronamientos de los que tenemos el DNI español regalado desde 1986 como suelen recordar algunos de sus palmeros en las redes sociales.