Más de un centenar de agentes de policía de todo el territorio español han participado a lo largo de esta semana en un curso de control de masas, organizado por la Policía Local de Ceuta.
Esta mañana, y como colofón a esta formación, todos ellos han formado filas a las puertas del Palacio Autonómico, donde el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, les ha saludado y les ha dedicado unas palabras, agradeciéndoles su visita a Ceuta.
Vivas ha trasladado que “a través de nuestra Policía Local estamos manifestando lo que en realidad es Ceuta a otros policías locales y nos permite también ponerles de manifiesto el aprecio, la valoración, la consideración y la admiración que le tenemos a todas las Policías locales de España”.
Unos agentes que se caracterizan por “la razón de la proximidad y la atención y el servicio al ciudadano. Es la mejor imagen que podemos tener de nuestros ayuntamientos”, ha añadido el presidente.
Asimismo, se ha hecho entrega de una placa de reconocimiento a Juan Ramón Galván, coordinador de los grupos de la UIR y encargado de impartir este curso a agentes de todo el país.
Una vez finalizado el acto, Galván ha atendido a los medios de comunicación para ofrecer algunos detalles de esta formación sobre control de masas que lleva ya varios años realizándose.
Según ha manifestado, “es un curso de formación de la Ciudad que es exigible a todos los miembros de la UIR para entrar y para mantenerse. Es un reciclaje que hay que hacerlo de forma anual”.
En cuanto al contenido del mismo, versa sobre el control de aglomeraciones de personas, aunque Galván ha querido dejar claro que “no se trata de manifestaciones, que no es nuestra competencia, sino una reyerta en un botellón o una barriada que sea conflictiva. Saber controlarlos y estar fríos”.
En total han sido 120 agentes los que han participado en esta actividad que sirve para ponerles al límite ya que “empezamos a medianoche, dejamos dos horas entre turno y turno de trabajo para romperles el sueño y crearles un grado de estado de ansiedad de modo que si saben aplicar la formación así, cuando se está tranquilo sale todo perfecto”.
Durante estos días, los agentes de policía local han trabajado para dar lo mejor de sí mismos en caso de tener que actuar ante una emergencia.
Es una gran pena que D. Juan Ramón Galván no sea jefe de la Policía Local. Todo les iría mucho mejor.
Un profesional de los pies a la cabeza y llevando una unidad como pocos sabrían hacer.
Galván. Un gran profesional comprometido con la institución de la que es miembro y con la sociedad a la que sirve.
Todos nos deberíamos de sentir más seguros sabiendo que él, o profesionales bajo su mando velan por nuestra seguridad.
La pena que uno que se cree más listo, no lo deja trabajar a tope.
Más razón que un santo