Efectivos de la Marina Real han frustrado un intento de salida de inmigrantes desde la playa de Bouhndiya en la región de Áshakar, en Tánger. Los integrantes de la unidad interceptaron cuatro embarcaciones que transportaban a decenas de inmigrantes, algunos subsaharianos y otros de origen marroquí, coincidiendo con la oración del viernes.
Según fuentes recogidas por el medio sabahagadir.ma, los botes se estaban preparando para zarpar en un intento de llegar a las costas europeas, pero la rápida acción de la Marina Real impidió que lo lograran.
Así se interceptaron los botes y se prestó asistencia a los inmigrantes que iban a bordo. Todos fueron trasladados al puerto de Tánger para los trámites legales correspondientes.
Esta operación se enmarca en los intensos esfuerzos que llevan a cabo las autoridades marroquíes para limitar el fenómeno de la inmigración que está experimentando un aumento en varias regiones del norte.
Más controles tras lo ocurrido el pasado fin de semana
De hecho, este pasado fin de semana se vivieron los momentos peores de presión en cuanto a intentos de entrada en Ceuta. Según ha comunicado Marruecos, fueron más de 3.000 los detenidos, pero a ellos suman los 152 por alentar al pase a Ceuta a través de mensajes en redes sociales y vídeos difundidos mediante la aplicación Tiktok.
Esta operación llevada a cabo se suma a los controles que están ejecutándose para evitar la salida de inmigrantes por vía marítima, pero también adentrándose en los bosques con el ánimo de poder entrar en Ceuta o en la ciudad hermana de Melilla.
Los controles ejecutados por el vecino país no cesan, aunque la vigilancia en apariencia es menor. Se trata de mantener un mayor blindaje ante el temor de nuevas incursiones en unos momentos en los que la frontera sur atraviesa momentos muy delicados.