El ICD reunió al Consejo Rector para reconocer facturas sin consignación por un importe superior a los 209.000 euros. Según Caballas las facturas corresponden a gastos contraídos durante los años 2009 y 2010 (algunos anteriores). “La existencia de estas facturas es una prueba más de la caótica gestión llevada a cabo por el PP en el ICD, corroborando la valoración que hizo Caballas en el Pleno en el que se propuso la disolución de este organismo” indican en un comunicado público.
Los gastos que ahora se pretenden reconocer no responden a situaciones imprevistas o sobrevenidas que hubieran justificado haberlos contraído prescindiendo del procedimiento legal, lo que demuestra que esta situación obedece a otras causas. Probablemente se ha gastado en lo que no se debía, y se ha dejado de pagar servicios contratados, lo que además perjudica gravemente a las empresas afectadas.