La graduación de los alumnos de cuarto curso de la Facultad de Enfermería de la Universidad de Granada (promoción 2019-2024) han despedido hoy en Ceuta una de las etapas más importantes de su vida, la era universitaria.
El acto ha estado cargado de emociones, abrazos, risas, recuerdos y la pedida de mano a una de las graduadas, que se ha quedado tan sorprendida como el resto de los asistentes.
Antes del comienzo, los casi graduados esperaban en la parte de arriba del patio de la Facultad de enfermería, hasta que fueron llamados por el vicedecano de estudiantes Juan José Ramos.
El acto ha sido inaugurado por el delegado del Rector para temas de salud, José Juan Jiménez, encargado tanto de abrir el acto, como de cerrarlo.
El Rector Magnífico de la universidad de Granada entró en la graduación a través de un vídeo en el que agradeció a todo el personal técnico, de servicios y todos aquellos que conforman el engranaje de la Universidad. También les deseó lo mejor a todos los graduados.
Tras esto, subieron la madrina y el padrino de cuarto de enfermería, elegidos por los alumnos, María Adelaida Álvarez y José Luis Gómez, que han dedicado un discurso muy divertido a sus alumnos. El padrino dijo estar muy orgulloso de la promoción de este año, que ha servido de apoyo en el que ha denominado el año más difícil de su vida.
La madrina también ha dedicado a los alumnos unas tiernas palabras. "Sois magníficos. Lo sé desde el primer día cuando os hice escribir en un papel lo que queríais en un futuro y todos vosotros escribisteis que era ayudar a los demás. Ahí sentí que lo tenía todo ganado”.
Una vez finalizados ambos discursos subieron los alumnos Raúl Martínez y Ana Iris López a dedicar unas palabras a sus compañeros. "Todos veníamos con prejuicios sobre Ceuta sin saber todo lo que nos regalaría. Sin imaginar que esa persona que se sentaría al lado tuya se convertiría en parte de tu familia. Gracias a todos por hacer de estos años una experiencia tan gratificante".
El paso siguiente fue la lectura del Juramento Hipocrático, un escrito con una vida de V siglos antes de Cristo, por los alumnos Esperanza Liébanas y Nicolás Martín.
Tras la lectura se procedió a la imposición de bandas.
Y quién iba a imaginar que una vez impuesta la última banda subiría el novio de una de las recién graduadas al escenario para pedirle matrimonio delante de todo un patio de la Facultad de Enfermería a rebozar de gente.
Un acontecimiento que ha sorprendido a todos y que ha dejado muchas emociones y lágrimas incontrolables entre los espectadores. Los asistentes se miraban entre ellos insinuando un: "¡No creo! ¿Le va a pedir matrimonio?". Todos estaban atónitos.
La recién nombrada enfermera se ha quedado muy sorprendida y no se lo ha pensado ni un momento. Su cara de felicidad gritaba a los cuatro vientos que sí quería. Su futuro marido celebró el sí con una sonrisa que le ocupaba toda la cara. Una imagen que quedará en el recuerdo para todos, pero en especial para estos futuros maridos y mujer.
A continuación, entregaron unos premios llenos de risas, unos premios con recuerdos íntimos de vivencias personales. Y, por último, proyectaron un vídeo con miles de momentos de todos estos años que quedarán grabados para siempre.
La decana Milagrosa Olmedo ha dirigido unas palabras sobre la importancia de que los chicos desarrollen su labor y de hablar con los pacientes, así como del orgullo que siente por ellos.
El delegado del rector para temas de salud, José Juan Jiménez, ha sido el encargado de cerrar este acto repleto de emociones y con una sorpresa única.
¿Cómo se pueden conseguir las fotos de la graduación? Aunque sea con la marca de agua de El Faro, por favor!!
Pedida de mano incluida...En serio, no sé como tiene las luces de hacer eso en ese momento concreto de la vida.Muchos lo verán como un acto superbonito y a mi parecer me parece un acto super tóxico...Lo digo porque ambos se merecen disfrutar de ese momento de graduación,sin destacar en nada,ya que cada cosa tiene su tiempo y los protagonistas de la graduación son todos los compañeros, compañeras , profesores y profesoras.¿Y si al final se divorcian con los años?(puesto que este tema está a la orden del día),pues...nada, se fastidiará el recuerdo de aquel día.Que ganas de mezclar los chivos con las cabras, de querer parecer innovadores cuando hay una delgada línea entre la innovación y el catetismo..Si me lee la futura novia vestida de blanco,solo puedo recomendarte que huyas de ese pretendiente y que no te cases tan joven.Quien te quiera de verdad va a querer que disfrutes de ese día tal cual sin ponerte en el compromiso de una pérdida de mano y que tengas que decir que "sí" por quedar bien y por la presión social(es que manda narices...).Mira por tu porvenir y que no te engañen con cuentos Disney y escenas de películas.