La asociación pregunta qué empresa contratará la Fase II y sobre las garantías laborales de la plantilla.
José Antonio Carbonell, vicepresidente de la asociación Marea Negra, irrumpe en la polémica entre la Ciudad Autónoma y la Fase II de los polígonos del Tarajal sobre la duplicidad en el servicio de seguridad privada que controla el comercio transfronterizo.
“Cuando se quieren abaratar precios lo único que conseguimos es que eso vaya en detrimento de los trabajadores y hacia el mismo servicio que se va a ofrecer en el polígono”, afirmó con rotundidad este portavoz del sector.
Carbonell consideró “indiscutible” y “loable” que los empresarios contraten a la empresa de seguridad “más acorde”, “que mejor se adapte a las necesidades del servicio” y cuya financiación “tiene que salir del bolsillo del comerciante”.
Discrepancias
Marea Negra discrepa de la Fase II acerca de la pertinencia de retirar a Eulen del paso de mercancías ‘Tarajal II’, como propone al Gobierno su presidente, Bilal Dadi, quien destaca el ahorro económico que supondría para la Ciudad que la empresa que va a contratar por el Plan de Seguridad asuma también el operativo que Servicios Tributarios tiene en el paso de mercancías.
Esta asociación dio su “apoyo” a Eulen porque, valoró, “en todo momento están haciendo las cosas bien y, hasta donde sabemos, es la empresa que tiene que seguir allí”.
En primer lugar, el equipo de Carbonell preguntó a la Fase II “cuál es la empresa que supuestamente” va a poner al frente del polígono porque le interesa saber “de qué tipo de mercantil se trata” tras la experiencia con otras como Marsegur que tiene a su plantilla “pidiendo limosna y sin cobrar sus nóminas”.
En ningún momento discutió que consulte presupuestos “más asequibles” pero, repitió, “nunca en detrimento del trabajador”. Esta asociación del ámbito de la seguridad privada instó a los empresarios a que contraten a una empresa “que cumpla con requisitos como el pago de nóminas a los trabajadores en su tiempo y forma; el respeto de sus tiempos de descanso; y que no tengan ningún problema a la hora de pedir alguno de sus derechos”, enumeró entre otras.
Con los datos aportados por Dadi, Marea Negra desconoce si el servicio que la Fase II quiere implantar en su polígono será “de calidad” y en el cual los vigilantes de seguridad tendrán que contar con “todos los medios a su alcance para poder llevar a cabo bien un cometido tan especial” porque, a su juicio, “no es un servicio cualquiera”.
Auxiliares de seguridad
Otra de las dudas que genera a Carbonell el anuncio de los comerciantes estriba en si su duración se prolongará durante “24 horas” a fin de que haya un “control en su totalidad”.
Los auxiliares de seguridad que la empresa de los empresarios incorpore al operativo tienen que proceder, añadió el vicepresidente de Marea Negra, de una empresa de seguridad y delimitar sus funciones.
Como recordó el portavoz de la asociación, su papel es de “apoyo a los vigilantes de seguridad y no como se está viendo actualmente que cogen a cualquiera, le ponen un peto amarillo y hace el control de las personas que pasan por allí”.
Baile de cifras en torno al contrato en el ‘Tarajal II’
Ni la Fase II de los polígonos del Tarajal ni la Ciudad Autónoma estuvieron muy acertados este martes a la hora de poner cifras al contrato de seguridad en el Tarajal II adjudicado a Eulen. Mientras que el polígono que encabeza Dadi estimó que la concesión asciende a 500.000 euros, el Gobierno lo cifró en 250.000 euros por una bolsa de 1.000 horas.
El anuncio definitivo de Contratación ofrece otras cantidades: 194.877,31 euros por 12.000 horas de servicio.