La visita a Ceuta de la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, ha servido para que conozca de primera mano el proyecto Lecxit en el CEIP Mare Nostrum, un programa que se ejecutó el pasado curso pero que en este no se está pudiendo realizar por falta de financiación.
En unas de las aulas del centro, Saiz ha estado hablando con los docentes y voluntarias que llevaron a cabo este proyecto, además de dos alumnos que participaron en él. La ministra se ha mostrado muy cercana con los escolares, Natalia y Gabriel, que le han hecho saber la importancia de esta iniciativa, así de cómo disfrutaron de ella el pasado curso.
“El libro es motor de cambio social y el programa socioeducativo Lecxit ha mejorado la velocidad y comprensión lectora de los alumnos participantes del CEIP Mare Nostrum de Ceuta. Además, en el 90% de los casos se ha elevado la nota en la asignatura de Lengua Castellana”. Así lo ha afirmado Elma Saiz, tras conocer en primera persona a los protagonistas de este proyecto de mejora de la comprensión lectora.
En el caso de Ceuta, a través del programa Lecxit se ha acompañado a 45 escolares de zonas vulnerables con el objetivo de incrementar su rendimiento educativo a través de la mejora de la comprensión lectora, sobre todo en niños y niñas que no tienen un hábito lector consolidado y no disponen de un acompañamiento lector en su entorno más cercano. Para ello ha sido clave la figura de los voluntarios, que tienen la misión de transmitirles el gusto por los libros y ayudarles a entender lo que leen.
“Ha sido una experiencia muy gratificante escuchar sus testimonios porque detrás de los proyectos y de las cifras siempre hay personas, que son el centro de nuestras políticas”, ha afirmado la ministra, que ha destacado la relevancia de invertir en programas que puedan tener un gran impacto para reducir las desigualdades en familias vulnerables.
“El éxito educativo es un factor protector de la exclusión social en la infancia. Combatir la pobreza y la desigualdad en las aulas requiere de intervenciones basadas en la evidencia”, ha añadido.
La ministra ha alabado la implantación por parte del Gobierno del Ingreso Mínimo Vital, que ha posibilitado llevar políticas de inclusión con proyectos como Lecxit.
“El Ingreso Mínimo Vital es una importantísima prestación absolutamente necesaria y un desafío que ha supuesto 50 millones en Ceuta desde su puesta en marcha y que se puso en un contexto muy complicado pero esta también es la cara de esta ayuda que trabaja por la política de inclusión”, ha detallado.
El director general de la Fundación José Manuel Lara, Pablo Morillo Pérez, ha querido destacar lo importante que es la “compresión lectora” para el desarrollo del alumnado.
“Tiene por objetivo impulsar el éxito educativo a través de la comprensión lectora. El reto era garantizar, a través de mentorización y dinamización de actividades de lectura, que todo el alumnado finalizase la etapa de primaria con un nivel de competencia lectora que les asegure su desarrollo educativo y social”, ha señalado Morillo.
Además, se ha referido a la importancia que tiene este tipo de programas en una ciudad como Ceuta, donde muchos alumnos hablan un idioma en casa y otro en su centro educativo. “Nos ha hecho darnos cuenta de la multiculturalidad y que la lectura hace igual en cualquier tipo de discriminación. Es fundamental en su entorno familiar vean que leen, si hay entorno lector, van a imitarlo y van a leer”.
Concretamente este proyecto, que se llevó a cabo el pasado curso, lo recibieron 48 alumnos de 5 centros educativos diferentes, entre ellos el CEIP Mare Nostrum.
Al no contar este año con financiación por parte del Gobierno central, no se ha podido ejecutar. Pero Saiz ha detallado que “va a estudiar” la posibilidad de que se pueda recuperar esa partida y, de esta forma, los escolares ceutíes puedan contar también el año que viene con este proyecto de compresión lectora.
Un 23% más de prestaciones IMV en un año
El Ministerio ha impulsado en Ceuta otros 3 pilotos de inclusión. En total, han participado 5.500 personas y la inversión supera los 2,8 millones de euros.
En la actualidad, más de 2.200 familias y 9.000 personas están percibiendo el Ingreso Mínimo Vital (IMV) en la Ciudad Autónoma. En ocho de cada 10 hogares hay menores.