22 de mayo de 2011

Como se diría en Star Trek, “fecha estelar 22 de mayo de 2011”, así se podría comenzar lo que desde el día uno de septiembre nos espera. Quedan nueve meses para las próximas elecciones a la Ciudad Autónoma de Ceuta, ya se acabaron las vacaciones, todo el mundo tiene en mente esa fecha.
A partir de este momento en todos los partidos se inicia una campaña personal. No son primarias, pero cada uno vende su producto lo mejor que puede, dando codazos indicando quítate tu para ponerme yo. Podríamos comparar esta situación con la época de apareamiento de los pavos reales, donde cada macho muestra sus mejores plumas para impresionar a la hembra y de esta forma conseguir sus favores.
Si queremos analizar un poco la fecha se puede deducir que el veintidós suma cuatro. El 2011 también suma cuatro. Del cuatro se puede decir que es seguro, práctico, disciplinado, ordenado y confiable. Es el símbolo de lo concreto, lo material y lo sólido, contiene los cuatro elementos. El mes de mayo es también muy significativo, ya que en la religión cristiana es el mes dedicado a María. El 2011 será el año del Conejo, Gato o Liebre, según el horóscopo chino. Será un año muy plácido, bien recibido y necesario después del feroz periodo del Tigre. Tendremos que ir a un lugar tranquilo para lamer nuestras heridas y recibir algo de descanso después de todas las batallas del año anterior. La influencia del Conejo, Liebre o Gato tiende a perjudicar a los que gustan demasiado de la comodidad, ya que afecta su eficacia y sentido del deber.
Ha empezado la cuenta atrás para las elecciones. A partir de ahora, en los partidos se comienza el trabajo de cara a ese día tan importante para Ceuta, ya que determinará el futuro de los próximos cuatro años de nuestra ciudad. Cada uno en su partido comenzara a realizar el trabajo que le sea encomendado o sepa hacer, a partir de ahora todos seremos buenos unos con otros, pero con la espalda pegada a la pared por lo que pueda pasar. Nos daremos abrazos y besos, entendiendo que detrás de cada gesto hay una intención oculta, pero todos conocemos la reglas del juego, todos queremos participar en la carrera política para conseguir que nuestro partido gane las elecciones, conseguir obtener los mejores resultados posibles para que Ceuta siga mirando al futuro con ilusión y esperanza, deseando llegar a la noche del 22 de mayo del 2011 para poder celebrar la victoria.
Durante esta legislatura se han escuchados muchas acusaciones. De unos partidos contra otros, pues a partir de este mes de septiembre y hasta la  finalización  de las elecciones a la Ciudad Autónoma, podremos comprobar como cada día ira subiendo el tono de acusaciones o insultos, algunos de ellos nos parecerán ridículos. Pero no importa, porque a partir de ahora entra en funcionamiento la cultura del “todo vale”, con el solo objetivo de conseguir un diputado autonómico más o tener representación en el pleno de la ciudad.
Seguro que mas de uno, cuando lea este articulo podrá pensar que es intencionado. Que me estoy aprovechando de este medio para situarme dentro de mi partido en una posición ventajosa. Mas lejos de la realidad, cualquiera que analice el articulo con seriedad se dará cuenta que cuando hablo de los partidos me refiero a todos y sin excepción. Como se suele decir en política estoy haciendo la travesea del desierto, como otras tantas veces, la conozco de memoria. En estos momentos me acuerdo de la letra de una canción de Fito & Fitipaldis  que decía, “no voy a sentirme mal, si algo no me sale bien, he aprendido a derrapar, y a chocar con la pared, que la vida se nos va, como el humo de ese tren”. Para el que le importe llevo veinticinco años en mi partido y aquí estoy, fiel a él. No a las personas. Pase lo que pase seguiré trabajando en mi partido, las personas vienen y van pero el partido es perpetuo, soy del Partido Popular de convicción, porque creo en su proyecto y convencido de que es lo mejor para Ceuta y para España.
En estos días y hasta la fecha señalada comenzaran a salir los fantasmas del pasado, reclamando un puesto en el presente, donde cada uno llegara por motivos distintos. Unos por su valía personal y su trayectoria a lo largo de los años. Otros por lo que ofrecen para permanecer en un sitio que nunca fue suyo, las circunstancias les hacen valedores de representar a un colectivo al cual no representan, utilizándolo para sus intereses personales. Para finalizar aquellas personas que su único logro es decir siempre que si, señalar a los demás y acusándolos de todo lo que se les ocurría fuese verdad o mentira, con esta técnica de desprestigiar a todo aquel que pudiera ser adversario para su objetivo final, ya que si tuvieran que llegar por su trabajo nunca hubieran alcanzado el estatus deseado.
Solo queda esperar, porque después de todo solo hay una realidad, que el pueblo es quien decide, coloca a cada uno en su sitio, no olvida lo que cada uno ha hecho. Al final el que decida quien debe representar los intereses de los que en esta tierra vivimos, sera el responsable de elegir a los mejores, sus errores y aciertos serán valorados por los que les precedan.