El cambio de gobierno anunciado ayer y realizado por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, era la confirmación de lo que era una realidad, aunque se había intentado por todos los medios despistar desde las filas socialistas. Está muy claro que el principal escollo como es la política económica, la cual no está dando los resultados apetecidos, permanece igual porque sus máximos responsables están en el Ministerio de Economía y Hacienda que no ha sufrido ninguna variación. Zapatero ha intentado una reforma de impulso político con la elevación del ministro del Interior Pérez Rubalcaba, al igual que deshacerse de algunos de los máximos colaboradores que han permanecido con él desde el inicio de su mandato en 2004 como Fernández de la Vega o Moratinos. Como titulan algunos medios de comunicación. Zapatero se ha jugado su última carta y se ha puesto en mano del nuevo vicepresidente del Gobierno para intentar llegar lo mejor posible a marzo de 2012.