La memoria del año 2015, publicada ayer, pese a las críticas del sector, no aprecia volumen de más.
La memoria anual, en este caso concerniente al ejercicio de 2015, publicada ayer por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, Ceuta y Melilla (TSJA), y valorada asimismo por el presiente del mismo, Lorenzo del Río, en una intervención pública, dejó datos novedosos respecto a cursos anteriores, provocando cierta sorpresa entre la grey judicial de nuestra ciudad. Porque en el balance, en el que como es habitual se pormenorizan diversos indicadores o parámetros que permiten tener una mejor radiografía y visión global sobre la situación y calidad de la justicia en el ámbito territorial del TSJA, se extrae, de manera principal, que los juzgados de Ceuta –algunos, que se detallan a continuación–, a diferencia del resto, con la excepción de sólo tres localidades más, no presenta un volumen de carga superior al normal, circunstancia que, sin embargo, había sido notoria en memorias pasadas.
En concreto, y sobre este importante punto, la memoria del TSJA indica que “la carga referencial de trabajo para los Juzgados de lo Social gira en torno a los 670-800 asuntos, que es superada en todos los juzgados, excepto en Ceuta, Motril, Jaén y Melilla”. “Esta circunstancia”, explica, “junto a la media de asuntos ingresados en los últimos años, pone de manifiesto la necesidad crear nuevas plazas judiciales en muchos partidos, al tiempo que mantener y ampliar, en su caso, durante 2016 la adscripción de JATs como integrantes de medidas de refuerzo permanentes en la jurisdicción social unipersonal”.
Asimismo, la memoria indica que “la escasa carga de trabajo que existe para optimizar y justificar un Juzgado de Vigilancia Penitenciaria en la Ciudad Autónoma de Ceuta, con carácter único y especializado, servido por un magistrado en régimen de exclusividad, aconseja solicitar al CGPJ que dicho Juzgado pase a ser servido en régimen de compatibilidad con la titularidad de otro órgano judicial, tal y como sucede en la Ciudad Autónoma de Melilla, y que en paralelo se acuerde la transformación de dicho Juzgado de Vigilancia Penitenciaria en otro Juzgado de Primera Instancia e Instrucción, con lo que esta jurisdicción mixta se vería sensiblemente mejorada, con posibilidad incluso de especialización y/o separación de jurisdicciones en dicha Ciudad Autónoma”.
Además, el TSJA considera que “es necesario plantearse la optimización de otros Juzgados de Menores, con un bajo nivel de ingreso de asuntos (por ejemplo, Granada, Huelva, Ceuta y Melilla), de forma que sus titulares puedan cumplir funciones de sustitución o refuerzo”, y añade al respecto apuntando que “precisamente, en el pasado estos juzgados en Ceuta y Melilla eran servidos en régimen de compatibilidad con la titularidad de otro órgano judicial del mismo partido”.
La memoria del pasado año del TSJA pone igualmente de relieve el papel que se ha jugado respecto a la creación de puestos: “El año 2014 fue más positivo y el Real Decreto 918/2014, de 31 de octubre, creó en Andalucía 20 plazas de magistrado en órganos colegiados y 46 de Jueces de Adscripción Territorial, más un juez de adscripción territorial para Ceuta y otro para Melilla, cuya efectividad se produjo a partir de abril de 2015”, señala.
En último lugar, y acerca de la casi eterna reivindicación de la sede única de Justicia para nuestra ciudad, que está ya programada y diseñada para la sede del Banco de España, el TSJA señala que “no existen novedades en edificios de nueva planta, ni en concentración de sedes y mejor utilización de las actuales, ni proyectos similares de envergadura, todo ello pendiente de poner en marcha desde hace bastante tiempo (Algeciras, Cádiz, Ceuta, Granada, Huelva, Jaén, Sevilla, entre otros)”, declaración que, por ende, no añade nada novedoso al estado en que se halla el mencionado proyecto de sede única de Justicia para nuestra ciudad.