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El contrato suscrito con la propiedad, a pesar de ser de alquiler con opción a compra, cuya mensualidad es de 4.500 euros, fija el precio de venta en 615.465 euros
El pasado 8 de junio se reunió la Junta Rectora del Organismo Autónomo de Servicios Tributarios de Ceuta y, entre los puntos del orden del día, se trató la adquisición de los locales B-13, B-14 y B-15 del Centro Comercial Ceuta Center, inscritos como Fincas, en los que actualmente se encuentran ubicadas las oficinas del mismo mediante un contrato de alquiler con opción a compra.
Según reza en la nota de prensa envíada por los socialistas, "en aquel momento, la presidenta del organismo, Susana Román, esgrimió que ejercitar la opción de compra sería favorable a los intereses del OAST, sin embargo el punto no fue votado y se remitió a una nueva Junta Rectora, que se celebraría a mediados del mes de julio, encomendando a los servicios técnicos de la Consejería el análisis del expediente en todos sus aspectos, incluidas las formas de pago".
El contrato suscrito con la propiedad, a pesar de ser de alquiler con opción a compra, cuya mensualidad es de 4.500 euros, fija el precio de venta en 615.465 euros, que deberá satisfacerse en el momento del otorgamiento de la pertinente escritura. Al secretario general del PSOE de Ceuta, Manuel Hernández, "le llama poderosamente la atención que en dicho contrato no existe cláusula alguna por la que el organismo descuente, de manera total o parcial, las mensualidades del alquiler satisfechas hasta el momento de firmar la propiedad; así como que el arrendamiento esté firmado por el que, en ese momento, era viceconsejero de Hacienda y presidente del OAST, Carlos Blasco, con fecha del 1 de septiembre de 2012, a pesar de que el arrendamiento entró en vigor con anterioridad, el 1 de abril de ese mismo año".
Hasta el momento dicen los socialistas que el tema ha quedado sobre la mesa, ya que “el Gobierno local no ha vuelto a convocar, desde el mes de junio, a la Junta Rectora del OAST ni existe ningún informe técnico hasta el momento; tres meses, sin hacer movimiento alguno y pagando la mensualidad que, a la hora de la compra no será descontada”, lo que supone “una nueva pérdida para las arcas municipales”, apunta Hernández, quien considera que “del precio fijado en el contrato de arrendamiento se debería descontar, total o parcialmente, las mensualidades satisfechas hasta el momento de la compra, que ascienden a más de 234.000 euros”.
Por otra parte, el socialista estima necesario realizar un estudio de mercado, barajar precios y plantear locales alternativos, al objeto de “garantizar que la adquisición se realiza en óptimas condiciones y que no supondrá un perjuicio para el bolsillo de todos los ceutíes”.
Asimismo, el secretario general se plantea si dichos locales cumplen las condiciones de salud laboral y si salvarían una inspección de trabajo, cumpliendo así con las responsabilidades administrativas que exige la ley.