Las
obras de los aparcamientos de
Juan Carlos I de Ceuta fueron entregadas por parte de Tragsa a la Ciudad hace unos meses. A pesar de ello, este recinto aún no se encuentra abierto para desahogo de los
vecinos por lo que han llegado las primeras quejas. Son varias pero entre las más destacadas está que no se encuentra abierto para estacionar los vehículos, que ya hay zonas del parking que se encuentran inundadas y que hay un parque infantil que no puede ser disfrutado por todos los niños del barrio. Las tres plantas en las que se han dividido estos aparcamientos han sido pintadas de
colores diferentes. Hay una zona azul, otra roja y una tercera amarilla. Todas bien distinguidas para que los usuarios no tengan ningún tipo de problema a la hora de estacionar sus vehículos. “Están llenas de agua, además de desprender un olor muy fuerte ya que este lugar está lleno de gatos que hacen sus necesidades”.
Además, los vecinos se han quejado de que las vallas que rodean el parking se han caído por el fuerte viento que ha azotado en los últimos días nuestra ciudad. “Las vallas se encuentran en el suelo, con todos los hierros fuera, con el peligro que eso conlleva para todos los niños que pasan a diario por ese lugar”. Otra de las quejas es por el parque infantil, una zona de la que escaseaba el barrio y que ahora teniéndola ya no se puede disfrutar. “Cuando lo vayan a poder utilizar los niños, ya estará todo roto y no servirá de nada”. Se trata de una actuación en la que la
Ciudad ha invertido 1,7 millones de euros para, por una parte, paliar los problemas de estacionamiento de los vecinos, incrementando en 111 el número de plazas, -6 de ellas para vehículos de personas con movilidad reducida. Además de los aparcamientos, con estas ejecuciones habrá una cosa importante que será el local social. Era una demanda de las personas de la barriada que ya, por fin, en poco tiempo podrán contar con un sitio de reunión.