La luna de este martes ha confirmado que este miércoles, 5 de junio,
se celebrará la ruptura del ayuno que da fin al mes sagrado de
Ramadán. Ante las previsiones, la explanada de Loma Margarita ya está lista para acoger la Musal-la que marca el final de este mes sagrado para la comunidad islámica. La zona ya está vallada y preparada para recibir a las miles de personas que participarán en el rezo colectivo programado paras las 9.15 horas. Como cada año habrá autobuses gratuitos para desplazar a todos los que quieran participar de este rezo, que comenzarán su salida desde las 8.00 horas de la mañana haciendo varias en El Morro,
Hadú, Rosales,
Príncipe Alfonso, Príncipe Felipe, Loma Colmenar o Sidi Embarek. Asimismo, la vuelta está prevista a partir de las 10:00 horas. Aunque el rezo es puntual, desde
la Unión de Comunidades Islámicas de Ceuta siempre suelen dar un margen de flexibilidad para que puedan participar de éste, ya que, según entiende Hamido Mohamed Abdeselam, delegado de la Comunidad Islámica Española y secretario de la Unión de Comunidades Islámicas de Ceuta, entre los fieles hay personas mayores o con discapacidad, así como familias completas, que se deben desplazar hasta esta zona y no quieren “generarles un estrés”. El clima que está haciendo en estos días, sumado a la hora del rezo, ayudará a que no se sientan temperaturas sofocantes típicas de estas fechas. No obstante, desde la organización calculan que entre el sermón y la oración la Musal-la no demorará más de 20 minutos.
Se ha acondicionado el lugar para albergar a cerca de 4.000 personas, ya que el Eid Al-Fitr es una de las fiestas más multitudinarias de la comunidad musulmana que se suele celebrar en familia. “Creemos que en el mes de Ramadán suele ser el evento más masivo en cuanto a la presencia de gente, el de las personas que acuden a la Musal-la. Es un día en el que prácticamente todo se hace en familia y la gente se queda en Ceuta”, afirma Mohamed.
Solidaridad para que todo salga bien
Son muchos los que participan en la organización de esta Musal-la, para que todo salga bien. Además de los miembros de la Comunidad Musulmana, tanto la Ciudad como Brigadas Verdes han tenido un papel destacado, señalan desde la UCIDCE, además de otros organismos como Obimace, Parque Móvil o Trace, ya que son muchos los preparativos que llevan semanas acometiéndose en la explanada. Ali Hamido Mohamed, miembro de la Comunidad Musulmana y de Brigadas Verdes cuenta que primero se tuvo que acondicionar la explanada mediante el desbroce y limpieza, que llevaron a cabo las brigadas desplegadas en el lugar, así como las vallas, sillas y esterillas que se proporcionaron por parte de la Ciudad, a través de la Consejería de Presidencia. “Hay voluntad suficiente para que esto salga bien”. Ya llevan más de ocho años eligiendo este lugar para celebrar la Musal-la y coordinado todos los preparativos para que la comunidad pueda disfrutar de esta celebración. Pero todo este trabajo también tiene una recompensa, ya que como parte de la organización se ha generado una nueva tradición, la de compartir una de las últimas rupturas del ayuno entre todos los que tienen la voluntad para que el rezo colectivo se pueda celebrar en esta explanada. “Desde que empezó el rezo, casi el último día del Ramadán venimos y tenemos la celebración de la ruptura del ayuno. La comunidad y vienen gente de otras comunidades que también participan y organizan los preparativos, nos invitan para estar aquí en conjunto a pasárnoslo bien”, explican. Después de compartir los alimentos, mientras todos confirmaban por la luna que mañana miércoles culminaría el Ramadán, acudieron unidos al rezo en hermandad, uno de los símbolos de este mes sagrado que está a punto de terminar.