Un tribunal marroquí condenó a la pena de muerte al autor de la violación y asesinato de una niña de once años en la región de Marrakech el pasado año, según informa este domingo el portal lesiteinfo.com. El crimen tuvo lugar en Ait Imour, una aldea de la región de Marrakech, cuando la niña, que regresaba a pie de la escuela, fue asaltada por un vecino, que la violó durante horas antes de asesinarla. El autor era a su vez un expresidiario, que acababa de salir de prisión tras purgar otra pena de quince años de cárcel, en aquel caso por intento de violación de una maestra, y las sospechas recayeron inmediatamente sobre él, hasta el punto de que fue detenido tres días después del crimen. Las penas de muerte suelen dictarse en Marruecos en sucesos que crean gran alarma social, como los infanticidios o el terrorismo, pero el país aplica una moratoria (no declarada) sobre la pena de muerte desde 1994, fecha en que tuvo lugar la última ejecución. Existe un movimiento contrario a la pena de muerte, apoyado sobre todo por partidos laicos y organismos pro derechos humanos, pero los islamistas y los partidos conservadores se niegan a hacerla desaparecer del arsenal legislativo marroquí.