Gonzalo Sanz, jefe de Gabinete de la Delegación del Gobierno de Ceuta, ha presentado este jueves el balance final de la Operación Paso del Estrecho 2025, una edición que, en palabras del propio representante, se cierra con “resultados muy satisfactorios” tanto a nivel nacional como local. La operación, que finalizó oficialmente el pasado 15 de septiembre, ha supuesto un reto logístico y de coordinación que, según Sanz, “se ha superado con éxito”.
En el contexto nacional, la OPE 2025 ha experimentado un ligero aumento del 2,9% en el número de pasajeros y vehículos con respecto a la edición de 2024. En total, han cruzado el estrecho 3.488.000 pasajeros y 857.000 vehículos, lo que, según los cálculos iniciales del Ministerio del Interior, estaba dentro del margen previsto. “Se han cumplido las expectativas marcadas por la comisión bilateral entre España y Marruecos”, ha apuntado.
Este crecimiento, según ha indicado Sanz, “responde al buen funcionamiento del dispositivo” y a la consolidación de un sistema logístico que cada año incorpora mejoras. “La coordinación entre administraciones ha vuelto a ser fundamental”, añadió, recordando que se trata de uno de los mayores operativos migratorios del mundo en un período tan concentrado.
Descenso leve en Ceuta: -1,3% en pasajeros y -2,8% en vehículos
En el caso concreto de Ceuta, los datos reflejan una tendencia ligeramente distinta. La ciudad ha registrado un descenso del 1,3% en pasajeros y del 2,8% en vehículos, lo que deja la cifra total en 538.000 personas y 124.000 vehículos en tránsito durante los 90 días de operación. A pesar del descenso, Sanz lo calificó como un resultado “muy similar al del año pasado” y dentro de la normalidad estadística.
Durante la fase de salida, que abarcó del 15 de junio al 15 de julio, se contabilizaron 1.365 rotaciones, lo que supone un ligero incremento del 0,5% respecto a 2024. Sin embargo, el número de pasajeros descendió un 1,6%, situándose en 273.000, y los vehículos bajaron un 3,6%, con un total de 63.300. La fase de salida coincidió con un periodo especialmente intenso de tránsito, que se resolvió con “agilidad y sin grandes incidencias”, según destacó el jefe de Gabinete.
En cuanto a la fase de retorno, desarrollada del 15 de julio al 15 de septiembre, se ejecutaron 1.380 rotaciones, con un descenso del 2%. Se transportaron 265.000 pasajeros y 60.600 vehículos, lo que representa bajadas del 0,7% y 1,9%, respectivamente. “Las cifras prácticamente calcan las del año anterior”, comentó Sanz, quien defendió que, pese a ser un año “ligeramente a la baja, la planificación ha funcionado con eficacia”.
Menos colas y mejores tiempos de espera
Pese a los desafíos logísticos que implica la OPE en Ceuta, Sanz destacó como gran avance la mejora en la fluidez del tránsito. “Hemos conseguido reducir los tiempos de espera en puerto, zona de embolsamiento y frontera”, afirmó. Esta mejora ha sido posible gracias a la experiencia acumulada en años anteriores y a una coordinación más precisa entre los distintos cuerpos operativos.
Según señaló, la OPE en Ceuta tiene una idiosincrasia particular que la diferencia de otros puertos como Algeciras, Málaga o Alicante. “Aquí, la OPE no se limita solo al puerto. Requiere una visión integral que abarca también el embolsamiento, el acceso fronterizo y la logística interna de la ciudad”, explicó.
Sanz subrayó que, pese a los descensos leves en cifras, la valoración global de esta OPE 2025 es positiva: “Hemos aprendido, hemos mejorado la operatividad y estamos ya proyectando cómo será la OPE del futuro, con más tecnología, más coordinación y mayor seguridad para todos los usuarios”.
Un triángulo clave: puerto, embolsamiento y frontera
En la parte final de su intervención, Gonzalo Sanz subrayó la necesidad de hacer un análisis más holístico de la OPE en Ceuta, teniendo en cuenta lo que denominó el “triángulo puerto–embolsamiento–frontera”. En este sentido, destacó que el reto principal es lograr que la OPE no interfiera en la normalidad del verano ceutí. “La Operación Paso del Estrecho debe dejar de ser un problema y convertirse en una de las soluciones que necesita una ciudad fronteriza, portuaria y de servicios como Ceuta”, afirmó.
Sanz recordó que Ceuta asume con profesionalidad su papel en esta gran operación migratoria que implica el retorno de más de tres millones y medio de magrebíes residentes en Europa a sus países de origen. Este 2025, el dispositivo ceutí ha tenido que enfrentar tres grandes retos, que según anunció, no se repetirán en 2026 debido a la finalización de importantes obras de infraestructura.
Tres desafíos superados en 2025
El primero de estos retos ha sido la reducción del 25% en la capacidad de atraque en el puerto ceutí, provocada por las obras de emergencia en la estación marítima. Incluso durante dos semanas, esta limitación alcanzó el 50%, afectando a la operativa de buques. “Hemos funcionado con la mitad de atraques en algunos momentos, lo que supuso un reto logístico importante”, reconoció.
El segundo desafío ha sido el plan de flota, que este año implicó una media de 30% menos capacidad de embarque debido al tipo de buques designados por las navieras. Aunque este ajuste no supuso un problema en días normales, sí se notó en jornadas críticas. A pesar de ello, Sanz afirmó que el operativo “ha respondido con eficacia y se ha superado con creces”.
En tercer lugar, el jefe de Gabinete destacó el impacto de tres grandes obras ejecutadas por el Estado en Ceuta por un total superior a 35 millones de euros. Estas incluyen: la nueva estación marítima (22 millones), la humanización del tramo de la N-352 en La Almadraba, y las actuaciones en la frontera inteligente, donde se han invertido otros 7 millones. Estas obras, aunque necesarias, han requerido ajustes operativos para mantener el flujo del tránsito sin generar colapsos.
Mejoras notables y perspectivas para 2026
A pesar de estos obstáculos, Sanz destacó mejoras claras en los tiempos de espera. En el embolsamiento, por ejemplo, en el 90% de los días, la espera fue inferior a 10 minutos, una mejora significativa respecto a años anteriores. “Solo en ese 10% restante, coincidente con los días más críticos, se registraron picos más altos”, puntualizó.
Con estas cifras y experiencias, desde la Delegación del Gobierno ya se trabaja en el diseño de una OPE 2026 que contará con infraestructuras renovadas y mayor capacidad operativa. “Hemos aprendido y estamos mejorando año a año. Ceuta demuestra estar a la altura de un operativo internacional de esta magnitud”, concluyó Gonzalo Sanz.
