¿Ceuta debería asumir las competencias en sanidad y educación? Juan Vivas ha respondido a esta pregunta con un rotundo “no”. Ha sido una de las preguntas que ha contestado el presidente en su intervención con motivo del nacimiento de la autonomía hace 30 años.
Asimismo, ha hecho un repaso de las tres décadas a nivel de cambios y relaciones con el Ejecutivo central. El presidente de la ciudad ha trasladado declaraciones en torno a estos dos asuntos durante la segunda sesión de las jornadas técnicas-jurídicas sobre el 30 aniversario del estatuto.
La negativa ha sido, en realidad, la repetición de lo que ya se dijo en el verano de 2024. Esta ha estado acompañada de matices y de explicaciones de por qué, a su juicio, no se puede contemplar una transferencia de administración plena al Gobierno local.
¿Por qué no?
El motivo por el que descarta esta opción es el hecho de que cree que ambas prestaciones públicas son “complejas” y requieren “un alto nivel de exigencia”. Desecha esta idea al concluir que de hacer lo contrario, “está en juego la igualdad de los ceutíes con el resto de los españoles”.
“Creo que deben estar en manos de la Administración General del Estado”, ha afirmado. “Ello no implica ni impide que, en lugar de la descentralización, se aplique la desconcentración”, ha proseguido.
“Es decir, que la toma decisiones respecto a los dos se den de manera eficaz y se acerquen a la ciudad para conocer de primera mano las realidades y para ejecutar los medios que permitan eliminar y neutralizar las carencias que existen”, ha concretado.
Artículos 13 y 26
La política, otro de los pilares centrales de la sociedad, también ha sido objeto de reflexión. Ha estimado que, desde que se implementó el documento, no se han explorado determinados espacios.
“Esta afirmación se justifica por la falta del uso de las facultades que otorga a través de los artículos 13 y 26”, ha mencionado. “Atribuyen a la Ciudad para llevar a cabo iniciativas legislativas que tengan por finalidad modificar Disposiciones Generales del estado que no hayan tenido en cuenta las peculiaridades de la ciudad o de entender necesidades específicas que requieran normas con rango de ley”.
Existen dos opciones en este supuesto según la primera disposición citada. “Se puede efectuar mediante una solicitud al Gobierno de la aprobación de un determinado Proyecto de Ley o con la presentación de una proposición de ley a la Mesa del Congreso”, ha señalado Vivas.
"Casos de indudable interés"
La explicación en torno al contenido legal ha sido, en realidad, un preámbulo para dar a conocer aquellos cambios que no se han desarrollado y que, desde su perspectiva, merecen un cambio.
“Son capacidades que creo que deberían haber sido aplicadas para atender, al menos, cuatro casos de indudable interés”, ha destacado. El primero de ellos es la cobertura “del vacío legal” en relación a la ordenación de suelo y urbanismo.
El segundo hace referencia a “garantizar la suficiencia financiera de la hacienda local y autonómica” con la finalidad de “compensar los mayores gastos que los condicionantes estructurales originan en el funcionamiento de los servicios propios”.
Economía y autocrítica
El tercero, ha versado sobre “la actualización y el perfeccionamiento” del régimen económico y fiscal especial por el que se rige Ceuta. El último ha consistido en la dotación a la Autoridad Portuaria de “un mar4co regulatorio concreto, habida cuenta de su carácter geoestratégico”.
“Para un mayor abundamiento, procede decir que, en lo referido a la suficiencia financiera y del REF, el Estatuto contempla mandatos expresos al respecto, a través de lo dispuesto en su artículo 34 y en su Disposición Adicional Segunda, respectivamente”, ha incidido Vivas.
Ha reflexionado que, para hacer realidad las modificaciones que tiene en mente, es preciso hacer “autocrítica por la inacción” y de “apelar a la necesidad y conveniencia de abordar, con el debido conceso, las iniciativas”.
Seguridad
Vivas ha estimado pertinente que el estatuto recoja de “manera explícita” la previsión contenida en la Estrategia de Seguridad Nacional, específicamente, el reconocimiento de la necesidad de una atención especial por parte de la Administración General del Estado.
La finalidad de incluir esta premisa, a su juicio, no es otra que “garantizar la seguridad de Ceuta y el bienestar de los ceutíes y de permitir el blindaje, aunque sea redundante, del mencionado Régimen Económico y Fiscal especial”. El presidente ha reflejado que, para él, “tiene sentido”. Ha profundizado en esta idea.
“Si es una norma básica de referencia para señalar cuáles son los pilares sobre los que descansa la estabilidad, si ya lo hace respecto de la irrenunciable soberanía; de una recurrente apelación al entendimiento entre administraciones y a la lealtad institucional y del requerimiento de comprender, respetar y apreciar la realidad multicultural de nuestra población, entiendo lógico completar estos tres fundamentos con los relativos la aludida política de Estado, decidida, enérgica y continuada en el tiempo”.
Cambios en el estatuto
Ha sido algo más escueto en cuanto a las modificaciones que, desde su criterio, son precisos. “La experiencia nos dice que sería conveniente diferenciar la Presidencia del Gobierno de la de la Asamblea”, ha relatado.
A su vez, ha indicado que se debe “posibilitar el cuestionado nombramiento de miembros del Consejo de Gobierno que no sean diputados, siempre, claro está, que no existan escollos de índole constitucional”.
No todo ha consistido en señalar con el dedo a aquellos asuntos que deberían ser repensados. Ha comentado que, el hecho de ser una autonomía, también ha sido una fuente de oportunidades.
“Nos ha abierto puertas de cualificados foros políticos, económicos y mediáticos a través de los que hemos hecho pedagogía acerca de la verdadera realidad de Ceuta, así como combatir tópicos y estereotipos”, ha mencionado.
Poner de manifiesto
Vivas ha hecho hincapié en que en estas intervenciones que conectan a la autonomía con el resto de regiones españolas y de ámbitos que “es española por los cuatro costados se mire por donde se mire; lo avala el derecho, lo acredita la historia y lo quieren los ceutíes, recen como recen y se llamen como se llamen”.
El segundo aspecto que a su parecer se ha promulgado es “que nuestra integridad y soberanía están garantizadas por el ordenamiento constitucional y por el Estado, cualquiera que sea el color político del Gobierno de la nación, a salvo, por tanto, de la alternancia en el poder”.
Por último, ha señalado que sí, que en estos paneles sí que se han reconocido los problemas que existen a nivel local, pero que, en sí misma “no es un problema, más bien todo lo contrario”.
“Gracias a la condición de su gente, es un ejemplo, espontáneo y cotidiano de los principios y valores que son pilares de nuestra Constitución y del acervo fundacional de la Unión Europea”, ha enfatizado. “Personas que han hecho del respeto y de la convivencia una manera de ser y de vivir compartiendo, un rasgo de personalidad que nos enriquece, nos distingue y del que nos sentimos orgullosos”.
Cuatro presidentes
Vivas, al inicio de su discurso, ha pasado revista por todas las acciones e iniciativas impulsadas desde el Gobierno local y con la autonomía como puente hacia el Ejecutivo central.
Ha recordado en relación a la etapa de José María Aznar cómo fue el proceso para poner en marcha el actual Hospital Universitario, la construcción del helipuerto o la ampliación de las infraestructuras para el abastecimiento de agua.
Ha destacado de este periodo la incorporación de un mecanismo para compensar pérdidas de recaudación, la concesión de ayudas en áreas de producción de agua, servicios sociales educación, políticas activas de empleo y menores.
Otros dos son “los dos recursos vitales que protegen a la hacienda de los vaivenes del comercio transfronterizo y la fortalecieron, en su momento, para acometer la necesaria tarea de mejorar la calidad de los servicios que la Ciudad tiene encomendados”, así como “la implantación de las bonificaciones en las cuotas a la Seguridad Social”.
Zapatero y Rajoy
Durante la fase de José Luis Rodríguez Zapatero en la presidencia se dio la reforma del modelo de financiación autonómica, “la regeneración de las playas de la bahía sur”, la construcción de la Biblioteca Adolfo Suárez y el impulso de la EDAR.
Respecto a la primera modificación citada, ha recordado cómo Elena Salgado, que en ese momento era vicepresidenta del Gobierno, le preguntó por qué consideraban necesario este cambio y que era “atípico”. Vivas aseguró que, de no hacerse, “dimitiría”. Finalmente, se llevó a cabo ese plan del que Ceuta fue la “única bajo el mando del PP que votó a favor de este”.
Rajoy comprendió su decisión, según ha narrado Vivas. Cuando llegó a ser el máximo responsable político en España, la ciudad fue escenario de más actuaciones. “Se dejó a salvo el esfuerzo inversor del Estado en Ceuta, así como el Régimen Económico y Fiscal especial de los duros ajustes y medidas drásticas que impuso la gravísima crisis vivida en los años 2011 y 2012”.
“Se elevó al 60% la bonificación en el IRPF, la mejora de la correspondiente al impuesto sobre Sociedades y la implementación de nuevos incentivos fiscales para favorecer el desarrollo de la industria del juego online”.
Sánchez
El tono ha sido crítico cuando ha llegado la etapa actual, la de Pedro Sánchez. Vivas se ha mostrado discretamente inconforme con su acción política. Ha remarcado en estos años las siguientes transformaciones.
“La elevación de las ayudas al transporte marítimo y aéreo para residentes, hasta cubrir el 75 % del precio del billete, la gestión de dos crisis que nos cortaron la respiración: la pandemia y el episodio de mayo de 2021, ese que nos hizo temer lo peor”.
Ha incidido que, en relación al segundo suceso, “se dio la entrada inmediata de la ciudad a la Estrategia de Seguridad Nacional aprobada en diciembre de 2021”. Ha sacado a relucir también el Plan Integral para el Desarrollo Socioeconómico, la exigencia del visado en las fronteras para los no residentes en el espacio Schengen y “la eliminación del porteo, también conocido como comercio atípico”.
Los más recientes han sido la activación de la aduana comercial de la que “se espera un funcionamiento convencional” y las negociaciones relativas a la situación de los menores migrantes “para resolver la situación límite que se vive”.
Para eso está la Ciudad para hacerse cargo de Sanidad y Educación ni más ni menos.
Y después de lo de Servilimpce y sus consecuencias os puedo asegurar que la Ciudad ya no se hace cargo de nada más. Y es más : si pudiera dar marcha atrás con Servilimpce lo haría de inmediato.
Autonomía pero no mucha 😉
Y no deberíamos tener ninguna, si acaso estar dentro de Andalucía, pero claro, eso no interesa a Marruecos y aquí manda quién manda. Aparte de que tener las competencias de Sanidad y Educación significa sufragarlas con nuestros impuestos, los de la ciudad, o depender de la buena voluntad del gobierno en lugar de que sea una obligación para él el mantener ambas competencias.