“Con muy poco ruido y con mucha discreción”. Así la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, ha dicho este martes que piensan desescalar la tensión que existe con
Marruecos actualmente, derivada de la entrada de miles de inmigrantes a Ceuta durante los días 17 y 18 de mayo pasados. Ha dejado claro que ha procurado ser discreta en lo que a Marruecos respecta, por considerar necesario crear un
espacio en el que se pueda reconducir la relación con este país, “y para hacerlo creemos que debemos hacerlo desde la discreción”. Ha recalcado también que se trata de una situación de crisis “que España no ha buscado, que no alimenta y que no quiere que siga a futuro”. En la entrevista en el programa Hoy por Hoy con Ángels Barceló, la ministra Arancha González Laya ha asegurado que lo que están buscando es crear las condiciones a través de la discreción. “No quiero en estos momentos decir ni hacer nada que pueda poner en cuestión nuestra voluntad de retomar esta relación y de retomarla con nuestros interlocutores marroquíes, no a través de los medios”. Con respecto a la
Operación Paso del Estrecho y que España siga quedando fuera, González Laya ha señalado que “este año no estamos en uno de normalidad por la pandemia” y ha recordado que, “como lo hicieron el año pasado y las autoridades marroquíes lo explicaron porque necesitaban que sus pasajeros, sus ciudadanos que volvían a su país pudieran hacerse una serie de test PCR en tránsito hacia Marruecos, esa es una decisión que le compete a ellos y que deben explicar”. Ha insistido en que “no estamos en una situación del Paso del Estrecho como se hacía antes de la pandemia, que no se nos olvide que también Europa tiene sus fronteras cerradas con prácticamente la totalidad del planeta, excepto un docena de países” entre los que no están Marruecos, Túnez y Argelia “y lo hace no es porque quiera castigar a nadie, sino porque todavía estamos retomando la normalidad pre pandemia y estamos todos nosotros, como Marruecos, tomando pasos, pero todavía no estamos ahí”.
Suspensión del régimen especial de Ceuta y Melilla
La ministra también ha hecho referencia a la información que se conoció sobre una propuesta que habría lanzado el Ministerio la semana pasada para suspender el régimen especial de Ceuta y
Melilla y pedir visados a los marroquíes que quieran entrar a las dos ciudades autónomas. Sobre este asunto, González Laya ha aclarado que “no hay una propuesta, lo que hay es un explorar del anclaje de Ceuta y de Melilla más firme en la Unión Europea”. Ha dicho que evidentemente Ceuta y Melilla, siendo España, están ancladas en la Unión Europea, “pero tienen
unas especificidades en lo relativo al régimen de Schengen, como en lo relativo a la Unión Aduanera, unas especificidades que ahora nosotros estamos revisitando a la luz del plan de recuperación que se está poniendo en marcha y que cubre a Ceuta y Melilla, en donde una de las cuestiones que se está examinando es, aunque no se ha propuesto nada, si ha lugar a cambiar, a revisar el anclaje actual de las dos ciudades autónomas en la Unión Europea. “No es que no estén en la Unión Europea, sí están, pero tienen unas especificidades que ahora estamos examinando si tiene lugar a cambiarse”. Pero ha dejado claro que se trata de exploraciones preliminares, “ni más ni menos que esto y cualquier cambio necesitará de un consenso de nuestro país y conversaciones con nuestros socios comunitarios”.
Biden y Sánchez no hablaron sobre el conflicto del Sáhara Occidental
Sobre la conversación sostenida entre Pedro Sánchez y Joe Biden en la Cumbre de la OTAN 2021, Arancha González Laya ha aclarado que el conflicto del Sáhara Occidental no fue uno de los temas abordados. “En la conversación de ambos no hubo nada al respecto porque no era el tema del día”, ha recalcado. Sin embargo, sobre la posición de Estados Unidos con Joe Biden en la presidencia, ha destacado que “no me gustaría hablar sobre Estados Unidos ni hacer especulaciones, nosotros siempre hemos dicho que respetamos a nuestros socios y aliados y entonces le competerá a Estados Unidos decidir cuál es su postura y España en esto no entra ni sale”. Ha cerrado el asunto diciendo que España siempre ha dicho que es importante que se le dé un impulso a las negociaciones en Naciones Unidas, “pero que más allá de eso que cada país defina su postura”.