El domingo 9 de junio 2019 será un día histórico en la vida de los Tetuaníes. Sin duda es un día que se grabará en la memoria de generaciones. Hay que aguantar horas con el color rojiblanco, en las que el MAT jugará su permanencia en la categoría de primera división de la liga profesional Marroquí. Está previsto según las encuestas realizadas por medios locales, que decenas de miles de seguidores rojiblancos se desplazarán a la capital Rabat para apoyar a su club en la última ronda de la Botola Marroquí contra el FAR, rival entrenado por el español Carlos Alós Ferrer que consiguió escaparse con dificultades de la zona de descenso la pasada jornada. La permanencia del único club que participó junto a los merengues y los blaugranas en la Liga española en la época del protectorado pasa por ganar al rival en la capital, contando así con su propio esfuerzo, o soñando en caso de pronóstico adverso con un simple empate del campeón Widad de la nación en la ciudad de Marrakech contra su club Kawkab, con que el MAT compite la categoría. Sin duda tal como hemos señalado en pasadas oportunidades, la reputación del futbol Marroquí está en juego en el último paso de la carrera de la Botola, Miradas transcontinentales localizarán el domingo 9 de junio 2019 los valores de Igualdad de oportunidades, juego limpio y justicia arbitral principios garantizados por leyes y credibilidad institucional según el número uno de la federación Marroquí, el carismático Fauzi lakjaa.
La polémica de la Champions robada al Widad
Es este sentido, hay que recordar que el destino impone sus reglas y leyes, Said Naciri, presidente de la liga profesional de fútbol marroquí y actual presidente del Club Widad de Casablanca, conocido como club de la nación, es la misma persona que denunció enérgicamente el pasado miércoles 5 de junio en la reunión de la CAF en París, apoyado incondicionalmente por el mismo diplomático deportivo Fauzi, el escándalo del famoso robo del título de la 'Champions de África' a su club Widad precisamente en la final jugada en la noche sagrada del Ramadán, el día 31 de mayo en el estadio de Rades contra el Taraji, un club histórico de Túnez. Una estafa futbolística de impacto internacional, que rectificó luego la junta ejecutiva de la CAF, ordenando la repetición de la final en tierra neutra. Hoy, sinceramente le toca al club de Naciri confirmar su firme creencia en los valores de credibilidad y honor y disputar la trigésima jornada con la cabeza alta de verdadero campeón... campeón continental.