Marruecos prohibirá a partir del 3 de enero la entrada a su territorio de todos los viajeros procedentes de China, independientemente de su nacionalidad, ante el repunte de contagios por covid-19 en el país asiático. Una ola de contagios y fallecimientos que centra nuevamente la actualidad informativa en el país asiático y ante la cuál el Reino no ha dudado en tomar medidas inmediatas y de forma contundente, pues en otros países la medida está siendo la de solicitar certificado negativo de contagio a los viajeros. El Ministerio de Exteriores de Marruecos explicó este sábado en una nota que el país estaba siguiendo de cerca en las últimas semanas la evolución de la pandemia en China. "Para evitar las consecuencias de una nueva ola de contagios en Marruecos, las autoridades marroquíes decidieron prohibir la entrada en territorio nacional de todos los viajeros procedentes de China, independientemente de su nacionalidad", se lee en la nota oficial del Gobierno. El ministerio añadió que esta medida "no afecta de ninguna manera la estrecha amistad entre los dos pueblos y la asociación estratégica entre los dos países a la que se aferra fuertemente Marruecos". La situación sanitaria en Marruecos está controlada, en este sábado se han registrado 47 nuevos casos, que lleva el total de infecciones desde el comienzo de la pandemia a 1.271.595 personas. Más de 24 millones de personas recibieron al menos la primera dosis de la vacuna anticovid. Algunas encuestas realizadas por las autoridades sanitarias en China señalan que hasta el 60 % de la población de algunas localidades se ha contagiado de covid. La Organización Mundial de la Salud se mostró recientemente "muy preocupada" por la evolución de la covid en China y reclamó "más información", a lo que Pekín respondió que ha compartido sus datos "de forma abierta, puntual y transparente" desde el inicio de la pandemia.