La repatriación o pasillo humanitario, como se les estuvo llamando a las últimas que se produjeron con el país vecino para sacar a los marroquíes que se quedaron atrapados por el cierre fronterizo en Ceuta, se ha quedado totalmente paralizada por la no respuesta de
Marruecos. La intención de
la Delegación del Gobierno en Ceuta era que este traslado se produjera antes del mes sagrado para que
los musulmanes pudieran estar junto a sus familias en estos duros momentos, pero Marruecos no ha contestado pese a la insistencia de la delegada del Gobierno, Salvadora Mateos, tal y como ha confirmado la Administración central a El Faro de Ceuta. Esa falta de respuesta no ha impedido, no obstante, que la delegada siga insistiendo para que este traslado se haga cuanto antes. La Delegación del Gobierno de nuestra ciudad, que ha hecho varias repatriaciones, h
abilitó un número de teléfono para que estas personas se pudieran apuntar en una lista, para saber de antemano quiénes eran los que querían regresar a su país de origen. Más de 200 fueron los que rápidamente se apuntaron para una repatriación que ahora ha quedado en el aire y que no se sabe cuándo se podrá llevar a cabo. Una situación complicada la de estas familias que se encuentran lejos de sus seres queridos, y en muchas ocasiones sin un sustento económico para poder subsistir en nuestra ciudad. En estos días, la institución de la plaza de los Reyes esperará una respuesta que dé luz verde al bloqueo para que se pueda llevar a cabo este traslado. La intención ya que no se materializó antes del comienzo del
Ramadán, pero se espera que se haga antes de que finalice este mes sagrado para que al menos los últimos días estén juntos a sus familias después de más de un año separados por el cierre fronterizo. Una situación más que difícil para estos marroquíes que esperan atentos al teléfono para recibir el aviso de que ya es posible cruzar el paso del Tarajal.