El Gobierno de Marruecos ha publicado en el Boletin Oficial el decreto que autoriza la creación de una empresa filial para gestionar la llamada 'Zona de actividad económica' que actualmente se construye en la localidad de Fnideq (
Castillejos), fronteriza con la ciudad de Ceuta. El proyecto de
zona económica tiene como fin "crear una nueva dinámica económica" en esta región a través de la implementación de "una plataforma capaz de atraer actividades económicas de un alto valor añadido", se lee en el decreto firmado por el presidente del Gobierno, Saadedin Otmani, y refrendado por el ministro de Economía, Mohamed Benchaaboune. La nueva zona –creada tras haber acabado el pasado otoño con el
comercio atípico de mercancías procedente de Ceuta con el cierre del puesto fronterizo de Tarajal ('Tarajal II')– supondrá una inversión total de 200 millones de dirhams (18 millones de euros) que abarcan estudios y realización en tres años, hasta 2022. Entre los contribuyentes mayoritarios en este proyecto figuran el Consejo de la Región de Tánger-Tetuán-Alhucemas y el Ministerio de Interior. Según el decreto, la empresa creada para gestionar la nueva zona económica será una filial de la Agencia Especial Tánger Mediterráneo (TMSA), compañía estatal que gestiona el puerto Tanger Med, que tendrá un capital de un millón de dirhams (91.000 euros). La 'zona de actividad económica' empezó a ser construida a principios de este mes en los lindes de la frontera con Ceuta con una superficie inicial de 10 hectáreas, que se prevé crezca hasta las 90 hectáreas. La zona consistirá en una serie de depósitos aduaneros que recibirán mercancía al por mayor del cercano megapuerto de Tanger Med. El pasado mes de octubre, las autoridades marroquíes comenzaron prohibiendo el tráfico informal de mercancías a la espalda de porteadoras o en vehículos, que entraban en el territorio marroquí desde Ceuta, que ha estado tolerado durante décadas y que daba trabajo antes a 9.000 personas.