‘Los Ulises’ refleja el problema de los inmigrantes que llegan a Ceuta

  {jaimage crop="TC" /}El documental no tiene entrevistas ni voz en off, simplemente se deja guiar por lo que va surgiendo. “En el frondoso monte de Ceuta, 57 inmigrantes indios viven refugiados en un campamento clandestino que han construido para evitar su deportación. A través de un acercamiento íntimo y visualmente cuidado, la película les acompaña en su día a día durante 2 años, en los que luchan por sobrevivir, esperando cruzar los últimos 14 km que les separan de Europa. ¿Lo conseguirán?”, así de fuerte e impactante reza la sinopsis de ‘Los Ulises’, una cinta documental que aborda la vida de los indios del monte de la ciudad y que mañana será proyectado en el Festival de Cine de Málaga como parte de la sección oficial de Documentales.
La película recoge la vida de unas personas que abandonaron sus casas en los empobrecidos pueblos de la India hace cinco años, vendiendo las tierras que tenían para llegar a Europa y mejorar sus condiciones de vida. En vez de ser llevados directamente a su destino, pasaron de manos de unos traficantes de personas a otros en un penoso y largo viaje a través de África en el que algunos murieron y muchos fueron arrestados, torturados o deportados. Tras una odisea de 2 años, este grupo de 57 personas sobre el que se centra el documental consiguió entrar clandestinamente a Ceuta. Años más tarde, muchos siguen atrapados en el lado africano del Estrecho de Gibraltar: tan cerca, pero tan lejos a la vez. Tras mucho tiempo en el CETI, y temiendo una posible deportación, los indios decidieron escaparse del centro y montar un campamento en el cercano monte. Una comunidad de casuchas ingeniosamente construidas con materiales encontrados en el bosque en la que sobrellevan el frío y la lluvia y comparten las tareas cotidianas. O dicho con otras palabras, el reflejo de un drama que se repite una y otra vez en el mundo entero y que tiene en Ceuta a más de medio millar de representantes, aunque Agatha Maciaszek y  Alberto García Ortiz -directores de la cinta- se centraron en el dramático caso de los indios, un drama que les empapó y que ha dado lugar a un documental muy realista en el que la emoción y las sensaciones hacen de guía.