Incidentes en aguas del África Occidental española

Analizando la historia se puede comprobar que la información en el ámbito castrense, en lo que se refiere a la Armada, es muy exhaustiva, de gran interés y donde no falta el más mínimo Digo esto con conocimiento de causa, como más adelante se podrá comprobar, ya que aparecen datos y documentos secretos, todos ellos de la Armada; unos procedentes de la Base Naval de Canarias y otros de la Comandancia Militar de Marina de Sidi-Ifni, tanto de la campaña 1957/58 como posterior a ella.

Buques rusos en puertos marroquíes

En una nota informativa (confidencial) de la Armada, entre otros así dice: “llegada a Casablanca material de guerra soviético. El navío soviético ‘Chusovog’ ha llegado al puerto de Casablanca, procedente de Odesa, con munición al parecer para el Ejército Real Marroquí. Elementos de las Fuerzas Armadas se hicieron cargo de dicho cargamento, compuesto de un centenar de cajas, que fue llevado a la Base de la Escuela de Mekinez. También, buques de la Marina de Guerra de Francia, interceptaron en el Mediterráneo en últimos de mayo al mercante sueco ‘Margot Hanien’. Efectuado el correspondiente registro por autoridades de Marina, se incautaron de armamento y munición 200 fusiles ametralladores y 500.000 cartuchos, protestando el capitán del buque y también la casa armadora, afirmando éstos que dicho material iba destinado a un país de Oriente Medio”. Otro documento secreto, nº 2059-A contiene lo siguiente: “encargado negocios de Lisboa comunica barco pesca Agadir estaría saliendo de madrugada para mar, portando armas de fabricación rusa. Este armamento tendría destino Argelia, Ghana para continuar a Guinea y zonas fronterizas Castillejos, Ceuta, Melilla y Sidi Ifni. Dicha comunicación se pasó a Ministerio de Marina”.

El documento secreto nº 147, de 27 de mayo de 1961, dice lo siguiente: “información día 16 actual llegó a Cabo Juby un transporte de guerra de nacionalidad egipcia, enviado por Abdel-Nasser, descargando en la rada lo siguiente: 800 soldados, 20 cañones ligeros de campaña, 700 fusiles, 9 camiones y 3 coches ligeros. La mitad del personal debidamente pertrechado ha quedado de guarnición en cabo Juby, el resto ha marchado a la zona de El Janfra”. Esto no es todo, pues en 1954 se descubrió en Bélgica una red que compraba y enviaba armas a Marruecos, destinadas a células del Istiqlal. La Marina francesa, poco antes de los ataques de 1957, capturó al buque polso ‘Lidice’ con 150 toneladas de armas y municiones para ser desembarcadas en las costas próximas a Nador. Otro documento secreto de 12 de febrero de 1958 del Servicio de Información así dice: “contrabando de armas. Detenido buque yugoslavo. Existe preocupación en medios marroquíes. La detención e incautación por parte de la Marina francesa del buque de bandera yugoslava ‘Eslovenia’, cargado de armas con destino Casablanca, según informes confidenciales no confirmados, salieron con destino a las bandas armadas del jefe de las mismas en Gulimin Ben Hamu”.

Los informes de la Comandancia de Marina de Ifni

De manera encubierta, Marruecos recibía armas, municiones y víveres para el llamado Ejército de Liberación Marroquí, unas veces mirando para otro lado y otras, incluso, colaborando. De ello da fe un documento secreto que obra en mi poder y que dice esto: “actividades marroquíes. Se ha recibido la siguiente información no confirmada, de que moro Hach Lahsen Ben Tahar de Sidi Ifni, ha recibido del vapor francés Quet Zing 2.000 sacos de algodón de 50 kg, 1.000 kg de harina para pan, siendo embarcados en el puerto de Marsella, por la Grand Mulin de Areneo, S.A. Avda. Roger Salingre, 134. Marsella. Hay sospechas de que es una operación de Boaida, encubierto con el nombre de Hach Lahsen Ben Tahar que, al parecer, es el testaferro. El citado Boaida se dedica a traficar con los rebeldes, cuando la agresión a nuestras Fuerzas Armadas en territorios de África Occidental española", Sidi Ifni, 23 junio 1958, el capitán de Fragata, comandante militar de Marina José López Aparicio-García. El general alemán Hans Doerr publicó un artículo en julio de 1958, en la revista Werkunde, en la cual expresaba con claridad quiénes eran los atacantes y quienes los apoyaban. Así decía: “por los acontecimientos descritos se puede resumir que el 23 de noviembre de 1957 el reino marroquí, sin haber sido provocado, hizo una agresión armada al territorio de soberanía española. Este hecho no ha sido conocido en el mundo occidental, ya que se ha desvirtuado con erróneas versiones y con ficciones. Por lo que respecta a España, esta vez demostró el jefe del Estado su habitual e inteligente moderación. A él más que a nadie hay que agradecer el que la agresión a Ifni no haya degenerado en un gran conflicto con Marruecos”.

Un escrito de la Base Naval de Canarias, recibido de la Comandancia de Marina de Sidi Ifni, dice así: “Núm. 69/61. Actividades de un pesquero marroquí. Apdo. nº 4. Se tienen sometidos a continua vigilancia los pesqueros de los nativos, pero esto sólo mientras están a la vista. Pero es previsible que, envalentonados por la impunidad con que ejercen esta ilegal actividad, amplíen el radio de acción, solos o con otras unidades, incluso de guerra y se llegue a producir una situación grave”, Sidi Ifni, 30 de noviembre de 1961, el capitán de Fragata, comandante militar de Marina, Pedro Recacho Eguía. Las bandas rebeldes del Ejército de Liberación Marroquí tuvieron apoyo y ayuda del exterior, en armamento francés, ruso y checoslovaco, incluso en vestuario se intervino un cargamento de capotes, fabricados en Gran Bretaña, como sus etiquetas lo demuestran, de ‘Tower Clotiers Ltd. Great. Coats Dismounted 1951. Patent Size. 7’. Otro documento confidencial, el cual obra en mi poder nº 59/69/61, dice así: “en la mañana de hoy fondearon en Sidi Ifni los pesqueros españoles ‘Dolores de Somar’ y ‘Torre Gracia’, comunican que han hablado por radioteléfono con otros pesqueros españoles en faenas de pesca, frente a playa Blanca y dijeron que guardacostas marroquíes les perseguían”, Sidi Ifni, 3 de diciembre de 1961, el comandante militar de Marina, Pedro Recacho Eguía. Sin embargo, se garantizó la seguridad en las costas gracias a nuestra flota. Entre ellos hizo una gran labor la corbeta ‘Descubierta’.