Salvamento Marítimo ha rescatado este domingo a once inmigrantes de origen magrebí, entre ellos dos menores de edad, cuando intentaban alcanzar las costas españolas a bordo de cuatro
balsas hinchables de juguete y un kayak en aguas del
Estrecho de Gibraltar. No se descarta su salida, en algunos casos, desde Ceuta. Y es que cruzar al otro lado se convierte en la única alternativa para muchos inmigrantes cuya única aspiración es escapar, dejar al otro lado su lugar de origen y llegar a la Península ya que Ceuta solo es ciudad trampolín, ciudad de paso. La vía marítima, sin duda la más arriesgada, sigue siendo la autopista para estos jóvenes, muchos de ellos menores de edad. En esta hilera de rescates en concreto, según han informado fuentes de Salvamento Marítimo, se han llevado a cabo entre las 00.00 y las 7.00 horas en distintas intervenciones realizadas por la patrullera de la Guardia Civil Río Miño y las embarcaciones de Salvamento Marítimo Salvamar Arcturus, Denébola y Enif. En ninguna se ha activado a la Salvamar Atria, que tiene base en el muelle de España. Los inmigrantes, todos varones de origen magrebí, entre los que se encontraban dos menores de edad, han sido rescatados en distintas actuaciones, localizándose a un total de cinco embarcaciones, cuatro de ellas balsas hinchables de juguete y un kayak. Todos los rescatados han sido trasladados en aparente buen estado de salud al puerto de Algeciras (Cádiz). El uso de kayak para cruzar al otro lado es la fórmula más extendida por los inmigrantes, otros se hacen con rudimentarias cámaras neumáticas que les sirven a modo de flotadores pero que no garantizan su seguridad.
Así fue encontrado un joven este sábado por Marsave, cuyos profesionales le salvaron la vida tras ser advertida su presencia en el agua, deshidratado y con hipotermia, cerca de un buque mercante.