El anuncio de la Delegación del Gobierno sobre la suspensión de manera indefinida del porteo, a causa de las obras de remodelación del entorno fronterizo, ha sido toda una sorpresa para muchos, en especial para los responsables de los
polígonos del Tarajal, que esperaban retomar esta actividad el próximo 3 de septiembre, fecha en la que se acordó, a principios de verano, para su reanudación.
Lejos de volver, los cálculos de la Delegación ni siquiera hacen una estimación clara de cuánto tiempo van a estar sin porteo y tampoco a quiénes va a afectar, ya que se aplicaría tanto para personas como para los vehículos, cortando también la actividad de los coches patera.
Sin embargo, la sorpresa les ha llegado a muchos porque la mayoría de los empresarios se han enterado de esta decisión a través de los medios de comunicación y del comunicado de prensa que la Delegación del Gobierno mandó para anunciar esta suspensión indefinida y el motivo. El presidente de la Fase II del Tarajal, Bilal Dadi, quizás la más afectada por esta decisión, asegura que no ha tenido comunicación oficial alguna de esta decisión. “Para nosotros son rumores de prensa”, argumenta el empresario, ya que en caso de suspenderse esta actividad, de la cual dependen muchas de la empresas de la ciudad, no sólo de los polígono, lo más lógico es que ya le hubieran informado, situación que no ha ocurrido.
“De Delegación no tenemos informes de nada”, insiste Dadi, por lo que para él y para el resto de personas involucradas en este proceso, el porteo se reanudará el 3 de septiembre, hasta que no haya ninguna información oficial que lo contradiga.
Creen que de ser así, la Delegación del Gobierno debería comunicárselo a todos ellos mediante algún escrito o bien, algún conducto oficial, no mediante la prensa como se han enterado. Por ello, seguirán adelante con lo planeado hasta el momento, bajo la determinación que se hizo en su día de que el porteo, y todo el negocio que genera, volvería el 3 de septiembre.
Afectaciones
En el supuesto de que esos “rumores de prensa” fueran ciertos, Bilal Dadi advierte que sería un verdadero problema que llevaría a la quiebra no sólo a las empresas instaladas en los polígonos del Tarajal, sino a muchas grandes superficies del puerto, así como a todas las empresas de logística que se dedican al transporte de mercancías que finalmente encuentran como destinatario final el porteo.
El presidente de la Fase II del Tarajal cree que es una decisión que tampoco le conviene a Marruecos, ya que calcula que son 10.000 las personas que viven de esta actividad. “No se ha hecho un plan”, reivindica Dadi, en relación a que no se pueda llevar a cabo el porteo.
Independientemente de los empleos indirectos antes mencionados, la suspensión del porteo sin fecha definida puede hacer peligrar, de manera directa, a un grupo de 200 a 300 empleos, lo que supondría una “ruina”. Tan sólo en vigilancia de seguridad, son más de 40 trabajadores, los cuales, si no hay porteo, no tendría sentido que prestaran el servicio.
Con este anuncio, reivindica el empresario, la Delegación está generando, a su parecer, una inquietud innecesaria entre todas las personas que viven de esta actividad.
Una información que sólo aparece en los medios
El anuncio dado por la Delegación del Gobierno parece que sólo se dirigió a los medios de comunicación y no a todos los implicados en la actividad del porteo. En dicho comunicado de prensa, no se determinaba por cuánto tiempo iba a estar suspendido y si afectaría por igual a los coches patera y al tránsito de personas, sólo que esta actividad dependería de los avances en los trabajos en las obras. “El sistema de porteo por Tarajal II retomará su actividad una vez que los técnicos determinen que la seguridad por este paso sea compatible con los trabajos que se van a ejecutar”, apuntaba el comunicado.