Este martes Francisco García Segado fue reelegido como presidente de la
Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos (FPAV) de Ceuta tras conseguir más votos que su única rival en las
elecciones, la presidenta de
Benzú, Rahma Mokhlis. Desde Cope Ceuta se han podido recoger sus impresiones pocas horas después de ser elegido. Entre sus principales retos: subvenciones para las asociaciones de vecinos que permitan reactivar las barriadas y el
movimiento vecinal, mejorar el trabajo e imagen pública de las
Brigadas Verdes, lograr acciones conjuntas en materia de seguridad ciudadana y formular unos nuevos estatutos para la FPAV, pues considera que los actuales son muy ambiguos.
- ¿Se esperaba el resultado? - Siempre he dicho: “no te comas la liebre antes de haberla matado”. Soy de los que prefiero esperar hasta el último segundo. Tenía una rival enfrente muy buena. Rahma es muy trabajadora, muy cumplidora y, por lo tanto, no podía ni tirar la toalla ni darme por vencido. Ella, para mí, es y seguirá siendo una buena rival, compañera y presidenta de barrio y se merece todos mis respetos.
- ¿Ya tiene formada la nueva junta? ¿Savia nueva o serán los mismos? - Lo tengo un poquito movido, pero, si Dios quiere, el lunes ya estará la Junta activa al cien por cien.
- ¿Habrá cambios? - Cuando repites puede ser, bien porque lo has hecho muy bien, o porque necesitas más potencial. Entiendo que necesito savia nueva, revolución y, si para mí, no me he quedado conforme con lo que ha pasado este año atrás, cambios tiene que haber. Si no funciona, se cambia, si funciona, hay que seguir. Cambios tiene que haber siempre, hay que revolucionar un poco las barriadas, hay que movilizar mucho y creo que, con quienes voy a contar, aunque algunos repetirán, necesito también un poco de veteranía.
- ¿Entra en las quinielas Rahma Mokhlis? ¿La llamarías para formar parte de la Junta? - Sinceramente no, porque ella tiene su propio proyecto, creado por ella y sé que es una persona que, aunque yo la llamara, no vendría. Ella cree en otra forma de hacer la federación de vecinos y el mundo vecinal y sé que no íbamos a coincidir. Para no coincidir y tener problemas, mejor cada uno por su lado y punto.
- Le hice a ella la misma pregunta, y contestó eso mismo… - La conozco, son muchas horas que hemos hablado. Sé que, si tiene que llamarme para darme un consejo la voy a tener ahí, y si yo la necesito para hablar con ella, la voy a tener ahí. Nuestra amistad no va a terminar por unas elecciones. Llevamos muchos años trabajando mucho. Ni yo voy a manchar su nombre, ni creo que ella manche el mío.
- Usted decía quería salir elegido porque la pandemia ha obstaculizado muchos proyectos, que necesitaba más tiempo. ¿Y ahora qué? ¿Revolución en qué? - Ahora sí, a meter la revolución. Aquí hay un nombre propio y con letras mayúsculas que son las asociaciones de vecinos. No cabe otra cosa que lograr que nos den las subvenciones de las asociaciones de vecinos para que vuelvan a funcionar las barriadas y los locales sociales, para que tengamos por fin las actividades que teníamos anteriormente. Queremos volver a tener lo que nos pertenecía, lo que es nuestro. Para eso se precisa de la Ciudad. Reconozco que han tenido buenas acciones con nosotros y sé que están por la labor de activar al 100% las barriadas, eso va a ser fundamental. Sin eso, fracasaría.
- Ahora tiene tiempo por delante y el de las subvenciones es un tema que se arrastra… - Yo voy a por todas, voy a salir como un miura.
- Sobre las Brigadas Verdes. Ha dicho que si fuesen igual a “problemas y más problemas” no le importaría desligar a la FPAV un poco. ¿Cómo? - Las Brigadas Verdes siempre están en el punto de mira. Quiero recordarle a todo el mundo que, con la pandemia, mientras todos estábamos en casa, ellos han estado desinfectando cada rincón de Ceuta. No voy a dar nombres, pero nadie ha ido a darles una palmadita, ni la enhorabuena. Pero también digo que no quiero que nos señalen con el dedo. En las Brigadas Verdes tienen que trabajar todos, del primero al último. Tienen que ser lo que eran, trabajar por y para Ceuta. No pueden estar dando vueltas por ahí, y que me llamen por teléfono y me manden fotos. Eso lo tengo más claro que el agua, o trabajan todos o el que no trabaje… No me va a temblar el pulso a la hora de sancionar a la gente. No podemos estar viendo un grupo de trabajadores haciendo su labor y en otra esquina otro parado. O trabajan todos… o esto es lo que hay. Y si no quieren trabajar para la FPAV hablaremos con la Ciudad. Pero tengo toda la seguridad de que va a ser un año muy bueno. Creo y confío en ello y que a partir de ahora va a ser otra la forma de trabajar.
- Bueno, una foto lleva a engaño, pueden estar en su tiempo de descanso… - El que la tira no la tira pensando en eso, sino con mala intención. Si hacemos una poda mala, somos nosotros… vamos a tener unos señores que hagan las cosas bien. En el Ayuntamiento hay muy buenas personas, buenos especialistas, tanto biólogos como los responsables de Jardines. Vamos a confiar en ellos y demostrar que realmente estamos capacitados para llevar esta fortaleza.
- ¿Quiere decir que ahora estaban trabajando ‘como pollo sin cabeza’? ¿algo así? - Por ejemplo, a veces entramos en una barriada y alguien dice que le molesta la rama. Inocentemente esa rama se corta y vienen los problemas. Entonces, a partir de ahora, cualquier solicitud desde las barriadas, ya sea de un presidente o de un vecino, se hará por escrito para que quede constancia, desde el Ayuntamiento. No vamos a hacer nada que no venga desde el consejero, del biólogo o de Parques y Jardines. Es la única manera para poder enderezar esto.
- Se le nota molesto… - Tenemos que hacerlo así porque no podemos fallar. Si fallamos significa que el año que viene desde la Ciudad se encuentren en todo el derecho del mundo de ofrecérselo a otra empresa. Pero creo que la FPAV sin las Brigadas Verdes y viceversa no pueden estar. Creo que es el palo que sostiene un poco a día de hoy el mundo vecinal.
- Para estos dos próximos años habla de las subvenciones y Brigadas Verdes. ¿Algún otro punto fuerte? - Seguridad Ciudadana.
- Sobre ese tema hablaba usted sobre la apertura de la antigua comisaría de Los Rosales, ¿qué pasó al final? - Nos dicen no se puede, pero no lo entiendo. No pedimos que se hagan actividades, ni partes, ni nada allí. Hace cuestión de dos semanas hemos quitado todos los grafitis y hemos pintado toda la fachada, está casi como nueva. Solo pedimos que ahí haya un furgón o de la UIR o de la UPAC, ahí tiene que haber vigilancia constante. No hay cámaras. A la delegada del Gobierno le digo, con todo mi respeto, que ahí no hay cámaras de vigilancia, la más cercana está donde ‘La Esperanza’. No hay ni una en toda esa zona y es una zona sin ley. Después también solicitamos que vuelva algo tan sencillo como el sereno de barrio o la vigilancia nocturna. Eso ya existe en otras ciudades, ¿por qué aquí en Ceuta no? Somos españoles como los de Sevilla, Melilla… la ley es la misma para ellos y nosotros.
- ¿Cómo se ha implementado eso en otras ciudades? - Hemos tenido una reunión con la
delegada del Gobierno y le hemos dicho que se ponga en contacto con las personas que llevan eso. No hemos recibido aún contestación por parte de ella, parece ser que no ha hecho su deber, así que la próxima vez le llevaremos toda la documentación correspondiente y de la forma que lo están haciendo, porque lo hacen tanto para los incívicos como para la seguridad ciudadana. Y está dando buenos resultados.
- ¿Cómo lo hacen? ¿Cómo se organizan? - Han contratado personas por el Plan de Empleo o seguridad privada. Y da buen resultado, lo hacen la mayoría por el Plan de Empleo, no vigilantes jurado ni nada. Al menos en melilla y Murcia son cuadrillas contratadas.
- Pero es un riesgo estar patrullando por la noche… - Tener a estas personas dando vueltas con un walkie-talkie conectados con la Policía, si ves algo apretas el botón y avisas a la
Policía. El que va a robar y te ve dice se van a otro lado. Llega un momento en que ya no les da tiempo a hacer nada. Resultado está dando. Otro tema, a día de hoy yo presumía de que Ceuta era la más limpia de España y a día de hoy pienso que como Murcia pocas ciudades hay, porque quienes trabajan para los incívicos les están educando a la vez, van a los colegios… lo que está pasando en Ceuta es
terrorismo medioambiental, no podemos esperar más tiempo, necesitamos una intervención ya. ¿Cómo? Para eso están ellos, la solución yo no se la voy a dar. Son los políticos quienes tienen que poner de su parte, para eso cobran y están en un sillón elegidos por los ciudadanos. Quedan muy bien diciendo que hay Plan de Empleo, muy bonito… pero si no hay seguridad en las barriadas estamos vendidos totalmente.
- Volviendo a lo de antes. Habla de savia nueva, revolución y la vía reivindicativa que se había perdido. Y todos unidos, no como se ha vivido la FPAV en los últimos años… ¿le gustaría que hubiera más candidatos? - Sí, no tengo ningún inconveniente. Todo el mundo tiene derecho a presentarse siempre y cuando se cumplan las obligaciones y requisitos de los estatutos. Otra de las cosas importantes de estos dos años es el cambio de los estatutos porque están demasiado ambiguos, y no todos entienden lo mismo. Estos estatutos ya no aguantan más, hacen falta unos que los entienda hasta un niño de 4 años.
- Para finalizar, ¿se arrepiente de algo de estos últimos años? - Equivocarme me he podido equivocar muchas veces, pero puedo garantizar que lo que he aprendido en estos años es algo tan sencillo como decir que no y saber decir que sí en su momento. Volver la vista atrás no, aprender de los errores, sí, siempre.