Hartazgo y cansancio, es la sensación unánime de
la plantilla del servicio de comidas del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes en Ceuta. Un mes más, vuelven a no recibir sus nóminas cuando a catorce de ellos se les sigue debiendo parte del importe del mes de agosto. “Se están riendo de nosotros”, ha indicado Bibiana Navarro, la representante de los trabajadores
quien aboga porque la Administración asuma los pagos de los sueldos ya que se está haciendo cargo de la compra de alimentos, suministros y reparaciones. En palabras de esta trabajadora, “vemos como llenan las neveras del CETI mientras las de nuestras casas están vacías”. Tras denunciar el impago de las nóminas del mes de septiembre, la situación para catorce de ellos da un resultado negativo en una nómina y media cuando en una semana tendrían que recibir la paga extraordinaria. “Vemos que se va a juntar todo y no podemos aguantar más, tenemos letras e hipotecas que pagar y los bancos no dan tregua”, ha lamentado una trabajadora. Tras innumerables quejas, dos anuncios de huelga y tres manifestaciones, el colectivo de empleados se encuentra desamparado ante una “solución aparente” que no llega, la destitución de Dulcinea Nutrición y la aparición de una entidad solvente que gestione el servicio de catering del centro. Según las últimas actuaciones del Ministerio de Inmigración y Trabajo, la cesión de la empresa “era inminente” ya que la compra de alimentos por parte de la Institución pública era algo temporal y extraordinario. Sin embargo, han pasado más de dos semanas y no se ha producido ningún avance en el asunto. Ante la pasividad de la Administración frente a su desesperada situación, los trabajadores han convocado un parón diario a partir del próximo 14 de octubre frente a la Delegación del Gobierno. De 12.00 a 12.30 horas, protestarán con el objetivo de hacerse oír y agilizar el trámite que expulse a Dulcinea de una vez por todas. A la reiterada reivindicación de la plantilla de Dulcinea se sumó hace unos días
la queja de los propios usuarios del centro quienes se concentraron en el patio del CETI para denunciar la precariedad de las comidas ofrecidas en el comedor alegando recibir “arroz, pan, café y poco más”.
MDyC exige que la Administración asuma los impagos
La agrupación política de Fátima Hamed ha hecho pública la postura de Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía de Ceuta a través de un comunicado en el que denuncia que se ha dejado a los trabajadores "a su suerte" equiparando la coyuntura de la plantilla de Dulcinea Nutrición con la "esclavitud de la edad media" refiriéndose a que les están obligando a trabajar sin derecho a cobrar sus sueldos. MDyC ha anunciado que va a exigir a la Delegación del Gobierno que asuma el pago de las nóminas pendientes de los trabajadores "así como es capaz de asumir las deudas comerciales de la empresa adjudicataria del contrato", indica la nota.