El gobierno de Marruecos ha decidido tras la reunión del Consejo de Ministros imponer medidas excepcionales para la celebración
del Eid al-Adha o Pascua del Sacrificio del cordero de este año. Así, se ha podido conocer que impondrá a cada cabeza de familia una autorización para poder sacrificar a un borrego en la tradicional fiesta musulmana. Esta decisión se toma
tras los últimos brotes de coronavirus surgidos en distintos puntos de Marruecos y con ella se pretende frenar la expansión del coronavirus, cuyos casos han aumentado en algunos lugares del país. La normativa establece que la familia deberá pedir al wali (gobernador) de su región o en su caso al representante vecinal de su barrio un permiso que este deberá decidir si concede a la familia que lo pida. Tras el Consejo de Ministros, se decidió instaurar estas normas inusuales con el fin de evitar una segunda oleada de coronavirus en Marruecos cuyos efectos podrían ser muy graves para el país. Además, desde el Ejecutivo marroquí se han mostrado firmes en su decisión de aplicar las medidas a rajatabla, con la consecuencia de que quien no las cumpla se verá expuesto a sanciones “duras”. De esta información se han hecho eco medios locales de Marruecos, y supone una medida que pretende evitar que surjan nuevos focos.
El caso de la provincia 'cerrada' de Safi
Las autoridades de Marruecos decidieron este domingo aislar a la ciudad de Safi, al sur del país, en la costa atlántica, después de que se haya registrado un nuevo foco de coronavirus, que podría convertirse en uno de los más graves del país. Safi es una de las ciudades del vecino país con más habitantes, superando los 300.000 habitantes, por lo que la decisión de una vuelta a las restricciones en esta ciudad es importante debido a la gran cantidad de personas a las que les afecta esta decisión. Según los datos dados a conocer por la delegación del Ministerio de Sanidad en Safi, se han registrado en esta ciudad 452 nuevos casos positivos durante este sábado, lo que supuso el 80% de las infecciones registradas ese día en todo Marruecos. Además se está la espera de los resultados de otras 673 personas, que han sido sometidas a los test PCR. Además de aislar a la ciudad, con prohibición de entrar y salir de la misma salvo casos de extrema necesidad, también se ha tomado la decisión de asilar del resto de Safi al tercer distrito urbano, donde se encuentra el mayor número de los infectados. A su vez el Gobierno de Marruecos también ha cerrado las 18 fábricas de pescado de esta ciudad, situada a 334 kilómetros al sur de Rabat. Aunque las autoridades no han dado detalles sobre el brote de Safi, varios medios locales coinciden en que el principal foco se concentra en varias conserveras de pescado.