Tras la concentración que llevaron a cabo este lunes los trabajadores del catering del CETI ante la Delegación del Gobierno, fueron emplazados a una reunión con
la delegada, Salvadora Mateos, que tuvo lugar un día después, donde pudieron exponer con claridad la situación real que están viviendo en el centro y el servicio que se está dando a causa del escaso presupuesto con el que cuentan.
Los trabajadores desglosaron ante Mateos todo el historial de impagos y retrasos que llevan meses sufriendo, aclarándole que no se trata de algo puntual, sino que la empresa ha incumplido con las fechas en demasiadas ocasiones. Asimismo, expusieron que no se trata del único caso, sino que en varios centros donde la empresa concesionaria, Dulcinea Nutrición, opera, están en la misma situación, con retrasos en los pagos y problemas para el suministro de los alimentos.
Durante esta reunión, explican los trabajadores que estuvieron presentes, la delegada se comprometió a ayudarles e interceder con al empresa, la cual les ha prometido que les pagará la semana próxima. “Eso significa que no tienen ni un duro”, comenta molesta una de las empleadas, ya que reconocen estar cansados de tantas promesas de solución que nunca llegan.
Agregan que a los empleados de la Residencia de Estancia Temporal de Siles, Jaén, quienes comenzaron una huelga indefinida el pasado lunes, igualmente les han prometido que cobrarán los retrasos de nómina la próxima semana. “A ver si es verdad que la semana que viene nos paga”, apuntan con ciertas dudas.
En cuanto a al rescisión del contrato entre
el CETI y Dulcinea Nutrición, la Delegación del Gobierno les comentó que estudiaría el caso para ver si se puede finiquitar el contrato, pero de momento les emplazó a esperar y ver si finalmente la empresa cumple con el pago atrasado. Se trata de una nueva respuesta, ya que el pasado lunes los mismo trabajadores hicieron ver que no estaban de acuerdo con la postura de la administración del CETI, la cual aseguran que defiende que el servicio que se presta es el adecuado.
De momento no van a llevar a cabo más movilizaciones hasta ver la respuesta de la empresa, si paga o no paga, y de ahí determinarán nuevas acciones. La huelga siguen en suspenso y se mantiene en estudio con el sindicato. Mientras tanto, no abandonan la reivindicación de que la única solución para erradicar este problema seguirá siendo, a juicio de los trabajadores, rescindir el contrato con Dulcinea Nutrición.