La fase retorno de la
Operación Paso del Estrecho (OPE) continúa dejando días muy intensos en la estación marítima con todos los desplazamientos de marroquíes y residentes en la ciudad que están llenando casi todos los barcos de la travesía Ceuta-Algeciras. Según datos de la Autoridad Portuaria de Ceuta, el pasado sábado 27 se subieron a bordo 2.193
vehículos y 7.474 pasajeros en otra jornada clave de la OPE.
Esto viene a confirmar una media de unos 2.000 vehículos diarios en los últimos días generando una absoluta normalidad en un circuito Puerto-
Frontera que está reforzado durante esa fase retorno para soportar volúmenes altos de vehículos y pasajeros. Durante la madrugada del sábado las navieras dispusieron hasta cinco rotaciones extraordinarias, lo que permitió comenzar la jornada con la explanada de embarque muy despejada.
Las primeras rotaciones regulares del domingo también se hicieron con total normalidad. Ninguno de los sistemas de emergencia (sistema espera dinámica muelle puntilla, ruptura de horarios o intercambiabilidad) se tuvo que activar ante el gran trabajo de coordinación que están llevando a cabo las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, el personal de la propia Autoridad Portuaria y los demás servicios complementarios que vertebran el dispositivo.
Atrás quedan ya las colas en el lado marroquí
Al otro lado de la frontera en los viales que conducen hasta la
parte marroquí del paso se han venido registrando esperas de más de 10 horas y colas kilométricas que han llegado a atravesar todo Castillejos.
Atrás quedan ya esas colas kilométricas. Parece que lo peor ya ha pasado. En Ceuta, mientras, en estos días se han introducido más elementos de señalización y se ha solicitado a la Asociación de Voluntarios de Protección civil que colabore en las tareas de agilización del tráfico en la avenida Cañonero Dato. La Delegación del Gobierno, la Autoridad Portuaria y Capitanía Marítima están realizando, con la colaboración de la Ciudad, un seguimiento de la actividad y los flujos de tráfico “en tiempo real” para “garantizar un buen servicio al pasajero y una no interferencia con la circulación y la normalidad en nuestra ciudad”.