Ambos han destacado la "grave preocupación" existente entre los empresarios de las dos localidades por la modificación a las bonificaciones a la Seguridad Social. También sobrevuela una notable incertidumbre por la aduana comercial, que en principio iba a ponerse en marcha con mayor premura, pero por el momento la tónica es la inexistencia de noticias por parte las Delegaciones del Gobierno de las dos ciudades autónomas. En la misma línea, también se ha hablado sobre la aplicación del régimen de viajeros por parte de Marruecos, los problemas derivados del coste del transporte en ambas ciudades, la necesidad de actualizar la normativa aduanera para agilizar trámites y explorar nuevas líneas de actividad económica en el movimiento de mercancías y de los efectos impositivos negativos la aplicación del IPSI en cascada en el sistema productivo de Ceuta y Melilla, "efecto especialmente pernicioso en un escenario de alta inflación", como es el actual, más a nivel internacional, que dentro de la propia España. Todos estos asuntos van a ser objeto de una estrategia de trabajo conjunta de las confederaciones empresariales para poder incluirlos en las agendas de los diferentes ministerios del Gobierno de España como una prioridad para ambas ciudades.
Marco aduanero
La Confederación de Empresarios de Ceuta (
CECE)
participó a mediados de abril en la organización de un workshop de trabajo sobre la
normativa aduanera. La reunión fue dirigida por un despacho especializado de consultores aduaneros de reconocido prestigio a nivel nacional, auspiciada por la Confederación de Empresarios de Ceuta y el Gobierno de la Ciudad Autónoma a través de la sociedad pública
Procesa. Con estas actuaciones, desde la Confederación de Empresarios se está trabajando en que las empresas de la ciudad autónoma cuenten con un marco aduanero ventajoso que sea generador de riqueza y actividad económica.