Este miércoles, los representantes de AUGC Ceuta han llegado al
Palacio de Justicia de Ceuta para ratificar la denuncia por un
presunto delito de odio e injurias interpuesta contra los diputados de
Vox, Juan Sergio Redondo y Patxi Ruiz. Omar Mohamed y Rachid Sbihi han llegado tranquilos y confiados en la justicia. Cabe recalcar que la titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Ceuta estimó el recurso de reforma interpuesto por la asociación de guardias civiles, al que también se adhirió el
Ministerio Fiscal. Este denuncia se presentó contra dos de los cabecillas locales de Vox por presuntos delitos de odio e injurias en las publicaciones en redes sociales que, con nota de prensa posterior incluida, realizaron para denigrarlos como marionetas de la “ultraizquierda promarroquí”. Dos horas más tarde de personarse en el juzgado la cúpula de
AUGC, llegaron a declarar los dos representantes denunciados de Vox, Juan Sergio Redondo y Francisco José ‘Patxi’ Ruiz. No se pararon ante los medios de comunicación, pero sí dieron las gracias por acudir a su llegada hasta el Palacio de Justicia.
A la salida de los juzgados, Juan Sergio Redondo y Patxi Ruiz han indicado a los medios que ellos apoyan a la Guardia Civil, a la que le han dedicado un "viva", resaltando que la AUGC es una asociación pero no es el Cuerpo. Redondo ha ironizado sobre la denuncia presentada y lamentado que se utilice a la Justicia para interceder ante este tipo de casos cuando está tan saturada. Ha criticado que se "busca la pena de telediario" al hacerles ir a declarar, por cierto, sobre una denuncia que ellos mismos dijeron que no existía y remitieron una nota de prensa acusando a este periódico de mentir. Redondo ha vuelto a presentarse como víctima por este tipo de denuncias, a pesar de que la formación también acostumbra a acudir a esos mismos tribunales que ahora considera faltos de recursos. Por su parte, Ruiz ha considerado una "vergüenza" que una "asociación se dedique a hacer política" y ha criticado que se haya reunido con "la ultraizquierda promarroquí" que es como consideran al PSOE, citando de manera específica a Juan Gutiérrez. Ha mostrado su sorpresa porque se reunieran con personas "de esta calaña". En el auto, que ha llevado a que tengan que declarar en la jornada de este miércoles y que fue publicado por este medio, la magistrada asume que “de las diligencias de investigación que han sido practicadas y sin perjuicio de una ulterior calificación de los hechos, existen elementos suficientes respecto de un presunto delito de odio de los mencionados en el artículo 510 del Código Penal”. La jueza revocó su resolución de inadmisión inicial porque, de acuerdo con la jurisprudencia existente, “el tipo, estructurado bajo la forma de delito de peligro, no requiere de un dolo específico, siendo suficiente la concurrencia de un dolo básico que ha de ser constatado a partir del contenido de las expresiones vertidas [...] partiendo de una situación incontrolada o una reacción momentánea, incluso emocional, ante una circunstancia que el sujeto no ha sido capaz de controlar”.
“No debe interpretarse exclusivamente en un sentido subjetivo o emocional como mera tendencia de quien expresa opiniones de odio con las que busca promover o favorecer el clima de hostilidad o discriminación, sino en sentido objetivo como conductas idóneas para generar esas situaciones”, justificó la jueza su cambio de criterio. La instructora también aceptó, respecto al delito de injurias, que no exige querella (los representantes de AUGC presentaron denuncia) cuando el Código Penal recoge que “se procederá de oficio cuando la ofensa se dirija contra funcionarios públicos, autoridad, agente de la misma, sobre hechos concernientes al ejercicio de su cargo’, requisito este que exime de la querella como requisito de perseguibilidad en el presente procedimiento”.