Después de llevar casi dos años en prisión preventiva en espera de juicio, el despacho IFS Abogados ha celebrado que la Audiencia Provincial anuncie que estudiará la demanda de recusación que su despacho ha interpuesto en contra del Juzgado de Instrucción número 4 de Ceuta, con el fin de que se juzgue a uno de sus patrocinados por un delito de lesiones, en vez de por tentativa de homicidio como había sido elevado por este juzgado. Reconocen que se trata de una acción que pocas veces se produce y creen que se debe a la actuación llevada, desde un principio, por la jueza. “Hemos visto actuaciones que yo no he visto en mi vida en una magistrada en los 19 años que llevo ejerciendo”, lamenta el abogado de este despacho que lleva el caso, en referencia a la actuación de la jueza de instrucción, denunciando que desde el inicio del caso no se tomaron en cuenta las pruebas para la defensa de su patrocinado, como declaración de éste, quien resultó herido de gravedad en la mano, y sí se recogieron los daños que se hicieron sobre la denunciante. Desde el despacho reconocen que “cada uno tiene su versión” de lo sucedido hace ya dos años, pero no ven comprensible que no se tuvieran en cuenta las pruebas que la defensa anterior de su patrocinado presentó, sin mayor explicación. Asimismo, su sorpresa mayor llegó cuando la fiscalía, “sin más pruebas de las ya presentadas” y después de cinco meses, elevó el delito de lesiones al de tentativa de homicidio, incrementando la pena por la que iba a ser juzgado. No obstante, en cuando a los años de prisión cumplidos, el abogado alerta que ya lleva dos en prisión provisional por un delito cuya pena máxima sería de tres años. De ser enjuiciado y resultar absuelto, esta persona ya habría cumplido casi la pena íntegra por un delito que presuntamente no habría cometido. Asimismo, una de las quejas constantes de IFS Abogados es que se le haya denegado en numerosas ocasiones, tal y como relata, la libertad provisional. “Dicen que está muy cerca de Marruecos” y que existe el riesgo de fuga. No obstante, por esa regla de tres, asume el abogado, no se podría otorgar ninguna libertad provisional en Ceuta, pues la proximidad es la misma para todos los acusados. “Empezamos a ver actuaciones que son denunciables”, detalla el abogado en relación a la actuación de la jueza. Relata un hecho en concreto, que califica como “el punto culmen” de su actuación, que sucedió al acudir la jueza a la prisión donde se encontraba su defendido, sin avisar a la defensa y sin compañía de la secretaria de la Administración de Justicia, dos normas de obligado cumplimiento, a llevar a cabo un “interrogatorio, que él consideró como una tortura”, detalla su letrado. “Se fue con una declaración que es la que quería conseguir de forma ilegal y en vez de encubrirlo lo puso en autos”, por lo que el abogado de su defensa anterior solicitó la nulidad, llegando a reconocer la jueza que el “acto había sido incorrecto”, decretando finalmente la nulidad de su propia actuación. Esto fue a más, según el abogado y por ello presentaron una demanda de recusación que la Audiencia Provincial está actualmente analizando. “Hemos conseguido algo que se ve una vez cada mil años, que rechacen por parte de la Audiencia el tema de la tentativa de homicidio y lo han vuelto a pasar a delito de lesiones”, celebra el abogado. Sin embargo reiteran que esta persona ya lleva dos años en prisión, a espera de un juicio, por un delito cuya pena máxima es de tres años.