Una experiencia agria que los alejará de Ceuta por un tiempo. Esto es lo que ha contado Francisco Conejos y su esposa, quienes vinieron de visita a la ciudad el fin de semana para asistir a una boda y fueron sorprendidos por el
incendio en el
hotel Puerta de África. La principal queja tiene que ver con el protocolo de atención a los afectados durante y después del incidente. “No nos avisaron para nada”. Cuenta Conejos que llegaron sobre las 14:00 horas al hotel y a las 18:00 horas asistirían a una boda en el Santuario de Nuestra Señora de África, donde empezando la ceremonia se esteraron de lo que estaba ocurriendo por medio de un amigo. “Cuando oí las sirenas salí a ver lo que pasaba, había tres dotaciones de Bomberos, ambulancias y
estaba ardiendo la primera planta”. Ha explicado que en medio de la
emergencia no lo dejaron pasar para buscar sus pertenencias por lo que regresó a la iglesia. Pero los problemas para Conejos comenzaron con la reubicación. Hay que recordar que las personas que se encontraban en el hotel fueron trasladadas a distintas dependencias de la Comandancia General de Ceuta, Casa del Mar y Residencia de Estudiantes de la Universidad de Granada. El hombre ha calificado de “vergonzoso” que lo hayan intentado realojar “en un cuartel militar”. Ha dicho que este tipo de situaciones son las que ahuyentan a los visitantes.
“Cuando me dijeron que me iban a realojar en un cuartel lo que hice fue coger el teléfono y llamar directamente a las Murallas”. Ante la situación, Conejos y su esposa se cambiaron de hotel, pero acortaron su viaje. La estadía en principio iba a ser hasta el lunes, pero al no estar a gusto decidieron marcharse el domingo una vez que
pudieron ingresar al hotel para buscar sus pertenencias. “El domingo por la mañana nos fuimos para el hotel, pero con lo puesto, con la ropa de boda, porque no nos habían dejado pasar, no nos dejaron nada”. Tras un segundo intento el domingo, Conejos pudo subir en compañía de dos policías para recoger sus pertenencias. “Se ha trastocado todo el fin de semana, pensábamos quedarnos hasta el lunes, pero fue vergonzoso que no me avisaran, no nos avisaron para nada, es vergonzoso lo que nos ha pasado”. Las dos principales críticas de este afectado han sido que como huésped no le hayan informado de lo que estaba ocurriendo y en segundo lugar que lo intentaran reubicar en un lugar que no consideraba adecuado. Conejos asegura que enviará al hotel, tal y como se lo indicaron, todas las facturas correspondientes a los gastos que tuvo que asumir, incluyendo el nuevo hospedaje, el cambio del billete de barco y la tintorería, pues toda su ropa quedó impregnada de humo. Pero más allá de eso, también piensa llevar su reclamación a la Oficina de Consumo. Este visitante señala su inconformidad con el trato recibido. Explica que al regentar un restaurante en Estepona, conoce bien lo que se debería hacer en estos casos y que lo ocurrido lo alejara de Ceuta por un buen tiempo.