La asociación defiende entre sus objetivos la defensa “del legado de nuestros ejércitos como patrimonio de todo el pueblo español y no sólo de sus Fuerzas Armadas”. Con este espíritu organiza su propio programa de actividades, entre las que se encuadra la exposición Soldados de España en la Historia, que incluye lienzos del artista catalán, entre ellos La toma de Biutz.
El acto fue presidido por el jefe de la Cuarta Subinspección General del Ejército y comandante militar de Valladolid y Palencia, el general de Brigada Aurelio Quintanilla Burgos. Le acompañaba, como máxima representación de la expedición del Grupo de Regulares de Ceuta nº 54, el coronel de Infantería Sebastián Vega Murcia. Entre el resto de personalidades figuraban Eduardo Robles Esteban y Jesús Dolado Esteban, presidente y vicepresidente, respectivamente, de la Asociación Retógenes Amigos de la Historia Militar, además del propio autor de la obra, Augusto Ferrer-Dalmau. Junto a ellos, Lucas Molina Franco, editor de Galland Books, y el capitán de Artillería Germán Segura García, que ejercía como comisario y máximo responsable de la exposición, así como otras autoridades civiles y militares de la capital castellanoleonesa.
El acto comenzó con unas palabras de bienvenida a cargo del comisario de la exposición, seguido de otra intervención de Eduardo Robles Esteban en nombre de la asociación que hacía entrega del cuadro. Cerraron el turno de alocuciones el coronel Vega Murcia y el general Quintanilla Burgos.
A continuación se procedió a la firma de la documentación que certificaba la donación de la obra al Grupo de Regulares de Ceuta nº 54, convirtiéndose así la unidad de forma oficial en propietaria y depositaria de la misma. Ejercieron como testigos de la rúbrica el propio pintor y el general Quintanilla Burgos.
Por último, todos los asistentes participaron en una visita a la muestra pictórica, ejerciendo como guía el propio comisario de la misma.
“Me siento muy orgulloso de incorporar a los fondos del Grupo de Regulares nº 54 una obra de la envergadura de La toma de Biutz, que recoge de una forma muy plástica los momentos dramáticos de un asalto a una posición”, valoraba el viernes el coronel Sebastián Vega en declaracioens a ‘El Faro’ antes de trasladarse hasta Valladolid para recoger el lienzo, que podrá verse en breve en Ceuta.
Una escena del combate librado en junio de 1916
El combate de Biutz en el que se inspira la obra tuvo lugar el 29 de junio de 1916 en ese pequeño poblado, situado a unos ocho kilómetros de Ceuta. Su defensa se basaba en varias colinas donde los rifeños se habían atrincherado, una de ellas conocida como la ‘Loma de las trincheras’. Siendo rechazado el ataque inicial, llevó el peso del asalto posterior el Tabor de Fuerzas Regulares de Melilla nº 2. En la escena, la formación encabezada por un oficial de Regulares, que bien pudiera ser el teniente Juan Salafranca Barrio, asalta la posición enemiga. Destacan las expresiones de los soldados que le siguen empuñando fusiles Mauser con largas bayonetas del modelo 1913. Las Fuerzas Regulares de Melilla se habían creado el 30 de junio de 1911, con efectivos de infantería y caballería indígenas y también españoles.
