Un sector de los comerciantes de los polígonos del Tarajal valoró ayer las medidas anunciadas por la Ciudad Autónoma relativas al control de contenedores de mercancía que desembarcan en la ciudad a través del Puerto.
“Juan Vivas –presidente del Ejecutivo local– ha demostrado que está especialmente sensibilizado con los problemas de los polígonos, sus empresarios”, aplaudió uno de estos ciudadanos que desarrolla su actividad económica en este recinto industrial.
El máximo representante del Gobierno autonómico “le ha dado un giro copernicano”, dentro de sus competencias, a la situación en el recinto industrial con nuevas soluciones en torno al ‘comercio atípico’, expuso otro de estos comerciantes que consideran adecuada su receta.
El Gobierno elevó al Pleno de la Asamblea una propuesta de modificación del sistema de tributación del IPSI de la ropa usada, consistente en introducir una “estimación objetiva del valor de la mercancía estableciéndolo en cuatro euros el kilogramo” (lo que equivale a pagar 0,4 euros por kilo). La intención, según explicó el Gobierno, era luchar contra el fraude. Por su parte, Caballas en la aprobación inicial se abstuvo pero considera que la modificación no se ajusta a derecho y que la estimación objetiva pretendida no encuentra respaldo en la ley que regula el IPSI.
El organismo autónomo Servicios Tributarios calculó hace unas semanas que el 50 por ciento de la ropa que proviene de China y otros países asiáticos, la cual pasa por Ceuta para su entrada en Marruecos, viene declarada por debajo de su valor. A esta conclusión llegó la Ciudad después de más de un año trabajando de manera intensa con un equipo de especialistas de Servicios Tributarios.