Mil soldados forman para dar la bienvenida al nuevo comandante general

Pocas semanas después de que Vidal de Loño dejara la Comandancia General de Ceuta, el general de división Ramón Martín-Ambrosio Merino le ha sustituido.

Aunque llevaba en Ceuta desde hace unos días, no fue hasta ayer cuando se celebraron los actos de entrega de mando.
El primero de ellos fue el de jurar o prometer su cargo. Martín-Ambrosio eligió la fórmula del juramento, que pronunció en un acto presidido por el teniente general jefe de la Fuerza Terrestre, Virgilio Sañudo Alonso de Celis. Es decir, el responsable de todas las unidades operativas del Ejército de Tierra fue el que presidió la entrega de mando al nuevo máximo responsable de la mayor parte de unidades militares con guarnición en la ciudad.
Esas fueron las unidades que, un rato después, formaron en el patio de armas del acuartelamiento ‘García Aldave’ con el coronel jefe del Tercio II de la Legión ‘Duque de Alba’ a la cabeza, Alfonso García-Vaquero Pradal. No encabezó la formación por tratarse del acuartelamiento de la Legión, sino por tratarse del coronel más antiguo en el empleo de entre los que desempeñan la jefatura de alguna unidad.
En el patio de armas formaron un batallón del Tercio, otro de Regulares, otro del RCAC 3 Montesa, uno del Ramix 30 y un último batallón mixto con una compañía del RING 7 (Ingenieros) y una compañía mixta con una sección de la Compañía del Mar, otra de la Compañía de Transmisiones 17 y otra del Batallón de Cuartel General. Después de desfilar la cabeza de la formación, fueron los batallones de Artillería, Caballería y el mixto de Ingenieros, ULOG y el resto de unidades, para dejar paso al final a la Legión y a los Regulares, los primeros con su paso vivo y los segundos con su desfile más lento.
En todo momento, el nuevo comandante general se mostró feliz por haber recibido “el destino operativo más importante al que un militar español puede aspirar”. Así lo dijo en su alocución en el acto celebrado en García Aldave. Antes, en el Salón del Trono del Cuartel General de la Comandancia General de Ceuta, mostró su alegría por volver a un destino en el que tendrá mando directo sobre unidades operativas, que son “la razón de ser de toda la estructura del Ejército”. “Volver al contacto directo con ellas, como aquí, me produce una satisfacción inmensa, y además estar en esta ciudad también”, aseguró el nuevo comandante general de Ceuta.
En su alocución, poco destacó respecto a cuál será su línea de trabajo. Se limitó a señalar la “ilusión” en primer lugar, la “eficacia” en segundo, y “la creación de un buen ambiente” en tercer lugar.
El teniente general Sañudo, que presidió los actos, tuvo buenas palabras para Martín-Ambrosio, con quien tiempo atrás compartió destino como capitanes, ambos, en la II Bandera Paracaidista. Ahora, como superior suyo, le deseó éxito. “Y, sobre todo, le deseo lo que Napoleón deseaba a sus generales: suerte. Porque él sabe cómo tiene que dirigir la comandancia”, aseguró, destacando los destinos de mando que ha tenido a lo largo de estos años como coronel y como general.

VIVAS RESALTA LAS REFERENCIAS A CEUTA EN EL DISCURSO DEL COMGECEU
Después de jurar acatar la Constitución, el nuevo comandante general de Ceuta tuvo ocasión de charlar con las autoridades civiles y militares de la Ciudad Autónoma, en una de las primeras tomas de contacto.
Vivas aseguró de Martín-Ambrosio que le causó “una extraordinaria impresión”. Y se refirió a varios puntos que ponen en relación a la ciudad y al estamento militar destacado en ella. “Me ha encantado su intervención por lo que supone de voluntad para trabajar en beneficio de la formación, en beneficio de la profesionalidad, y de la excelencia que ha citado. Me han emocionado las menciones específicas a Ceuta, que ponen en evidencia que ese vínculo tan estrecho responde a razones históricas; pero también a razones afectivas y sentimentales. Se ha referido a nuestra patrona, al carácter de una ciudad abierta”, destacó el presidente en funciones de la ciudad, Juan Jesús Vivas Lara.
Además, Vivas no dejó pasar la oportunidad de trasladar a Martín-Ambrosio su “más sincera felicitación y mejor disposición para mantener esa buena relación entre comandancia y ciudad”.
En efecto, durante su discurso, el nuevo jefe de la Comgeceu citó las tradiciones de Ceuta y sus unidades. “Deseo integrarme en la sociedad ceutí y pondré gran interés en ganarme la aceptación de su población civil y militar”, aseguró. A esto añadió lo siguiente: “Ruego a la Virgen de África que me dé fortaleza para cumplir mi misión, me ilumine en mi quehacer diario y que con el aleo siga protegiendo la ciudad como lo viene haciendo desde los tiempos del primer capitán general, Pedro de Meneses”.
Visto lo visto, es de esperar que las relaciones entre Ciudad Autónoma y Comandancia General de Ceuta sigan con por un camino de entendimiento, habida cuenta de la buena disposición que se mostró ayer desde los dos estamentos.